Enfocada en otra medalla olímpica

un gran 2019, el darme cuenta que sí puedo estar entre las mejores del mundo, me hace sentir satisfecha, porque me costó mucho trabajo regresar, lo cual fue difícil para mí”, declaró Espinosa.

Espinosa tiene dos medallas olímpicas: el bronce en Pekín 2008, en la plataforma sincronizada con Tatiana Ortíz, y la plata de Londres 2012, en la misma modalidad con Alejandra Orozco, pero en Tokio 2020 buscará esa presea individual que ha buscado desde Atenas 2004.

“Tengo un objetivo que es llegar a Tokio y bien preparada, porque quiero pelear una medalla y me quiero sentir bien conmigo, y quiero que al subir al trampolín en Tokio tenga la seguridad de que hice todo lo que estaba en mis manos para que saliera un buen trabajo en ese momento, entonces voy a trabajar, me voy a esforzar, y tengo la fortuna de estar con Iván Bautista, y le confío toda mi preparación”, mencionó.

También el Mundial y los Panamericanos le sirvieron para darse cuenta de los errores que debe evitar de cara a esa Copa del Mundo.

“Tengo que corregir varios errores, pero no son técnicos o que dependan de mi talento, solo es algo físico que tengo que avanzar, como es la cuestión del peso, y es algo que tengo muy claro donde sé qué debo trabajar, y que en cierta forma el que sucedan cosas antes de los Juegos Olímpicos es algo positivo, porque al fin y al cabo te das cuenta en qué debes mejorar y trabajar, para que en la gran fiesta en Tokio, que es la diferencia de todas las competencias, tenga que salir todo mejor”, explicó.

Espinosa también se ha puesto como reto mejorar ese salto que falló en el trampolín individual de tres metros, error que la dejó marginó del podio.