Cumplirle a EU en migración atizó la crisis, acusan ONG
Balance. Ven más detenciones, deportaciones, hacinamiento y discriminación a las personas en tránsito
Organizaciones no gubernamentales acusan que el acuerdo migratorio entre México y Estados Unidos atizó la crisis humanitaria, porque se endurecieron las detenciones, las deportaciones y se perpetuó la discriminación y no protección a las personas en tránsito.
Mañana se cumplen tres meses de la firma del pacto por el que se evitó la imposición de aranceles a productos mexicanos y el 10 de septiembre el canciller Marcelo Ebrard visitará Washington para evaluar los avances.
Con el fin de detener el flujo migratorio hacia el país vecino del norte, se implementaron retenes en carreteras, operativos en plazas públicas y hoteles, se desplegaron cerca de 26 mil elementos de la Guardia Nacional en las fronteras y se destinaron 19 embarcaciones al Golfo, el Caribe y el Pacífico.
Según el secretario de Relaciones Exteriores, del 8 de junio al 11 de agosto se rescató a 46 mil 616 migrantes en 51 puntos de contención en 13 entidades; el pasado 1 de diciembre advirtió que esta política se mantendrá después de los 90 días de plazo del convenio.
La directora general de Sin Fronteras IAP, Ana Saiz, destacó que tras la amenaza del presidente estadunidense, Donald Trump, elprogramamigratoriodeMéxico tuvo un giro radical.
“Vemos un endurecimiento tremendo en las deportaciones y detenciones conforme a la exigencia de EU. El gobierno inició con una política de brazos abiertos, de hospitalidad, pero de repente vemos un hacinamiento tremendo en estaciones migratorias, dijo en entrevista con MILENIO.
Olga Sánchez, fundadora del albergue de Tapachula, Chiapas, subraya que la migración continúa. “Vino para quedarse, no ha bajado nada, es una crisis muy fuerte, una crisis humanitaria que ha venido golpeando muy fuerte. En agosto aumentó el número de personas y la falta de comida”.
Gerardo Talavera, integrante de la Red de Documentación de las Organizaciones Defensoras de Migrantes, consideró que el acuerdo con Estados Unidos “nos puso en una situación de desigualdad; sí hay presión, el gobierno mexicano actuó muy distinto de un día para otro”.
Criticó que México, “con una posición social, de repente hace despliegues como el de la Guardia Nacional; como sociedad mexicana pensamos que los elementos están destinados a proteger a las personas”.
Al respecto, Saiz coincidió en que de un día para otro la nueva corporación policiaca estaba “no solo en el sur, sino en el norte, enfrentándose a personas que no son delincuentes”.
Aclaró que el fenómeno no es nuevo, pero se recrudeció con la intervención de la Guardia Nacional. “Quienes cruzan la frontera de México de manera ilegal cometen una falta administrativa y, como tal, debemos tener controles administrativos, pero no, estamos privándolos de libertad”.
El pasado martes la Red de Documentación de las Organizaciones Defensoras de Migrantes presentó su informe de 2018 y señaló que la política del gobierno de Andrés Manuel López Obrador es “más de lo mismo” respecto a la administración anterior.
Formada por 23 organizaciones defensoras, indicó que incluso algunas situaciones han empeorado camufladas en “un lenguaje humanista”, lo que está “agudizando” las malas condiciones para quienes llegan al país.
Aseguró que “la narrativa humanista” resultó una estrategia política de “detenciones masivas, arbitrarias, expulsiones sin el debido proceso” que genera “xenofobia y discriminación”.
Según la Unidad de Política Migratoria de Gobernación, el número de detenciones de migrantes centroamericanos y extracontinentales aumentó al menos 34 por ciento entre mayo y junio pasado.
En tanto que el Departamento de Estado de EU reportó en junio una baja de 43 por ciento en las cifras de arrestos y personas inadmisibles en comparación con mayo, cuando registró 144 mil 266, la más alta en una década.
En las revisión que se hizo a los 45 días del acuerdo, Trump destacó los avances para detener y asegurar a los migrantes; no obstante, en México se suspendió la entrega de tarjetas de visitante por razones humanitarias. Entre diciembre y enero, el gobierno entregó 18 mil 441 tarjetas, pero para los meses subsecuentes la cifra cayó.
Tercer día de protestas
Por tercer día consecutivo se enfrentaron migrantes y elementos de la Policía Militar, la Guardia Nacional y la Policía Federal afuera de la estación Siglo XXI de Tapachula, para exigir a las autoridades rapidez a la hora de analizar su situación.
Ayer por la mañana, africanos y haitianos intentaron retirar las vallas que los separan de la entrada principal de la estación migratoria, por lo que forcejearon con los uniformados por una hora. Lanzaron vallas y pintaron frases como “Queremos libertad” o “Instituto Nacional de Migración Mafia”. No se reportaron heridos.