Trogloditas “moralmente victoriosos”
El reciente aquelarre en la Cámara de Diputados por la renovación de su mesa directiva evidencia lo que son y lo que valen esos transformadores de cuarta.
Salidos de las cavernas del país llegaron a la llamada Cámara Baja (¡de verdad muy baja!) una runfla de trogloditas, gracias a tómbolas con “autoridad moral”.
No importaron antecedentes e ineptitudes, las “democráticas” tómbolas los justificaron como candidatos de MORENA y adláteres, y 30 millones de votos para el caudillo los legitimaron como “representantes populares”.
Estos neopróceres, representantes genuinos de una parte nada pequeña del engañado “pueblo bueno”, están ávidos de pasar a la Historia con López Obrador, “un cruzado, un iluminado, el único hijo laico de Dios”, según Muñoz Ledo.
La marejada producida por el entonces candidato presidencial depositó en las playas de la política ese sargazo para que le obedezca acríticamente.
Pero la tracalada en el referido cambio de mesa directiva, que puso en jaque a la vida parlamentaria, no fue casual e inexplicable, responde a un plan perverso al que se suman la Ley Bonilla (para aumentar el mandato del gobernador en Baja California), el cambio a la ley en Quintana Roo (para controlar el Congreso local) y la ilegal remoción del Fiscal General en Veracruz.
Esos cavernícolas y sus dirigentes se asumen “moralmente victoriosos”, y con derecho a decidir el destino nacional (contra leyes e instituciones) para darle la “felicidad al pueblo”.
La intentona en esa Cámara federal, de mantener en su presidencia a Porfirio Muñoz Ledo violando la ley y el acuerdo parlamentario suscrito por ellos, demuestra su mala catadura.
Este personaje, con 86 años a cuestas, ha vivido siempre en y de la política, lo que no es intrínsecamente malo, lo notable es su promiscuidad al haber militado en tantos partidos. Lo ha hecho en el PRI, el PARM, el PRD y ahora en MORENA, en alianza con el PT, el Verde y el PES. En el PAN no, pero apoyó a Fox y fue funcionario durante su gobierno.
¿Cuál fue su reciente desfiguro? Que fenecido el término legal se aferró a la presidencia de la Mesa Directiva y se tomó la licencia de balbucear con su ya cascada voz: “sufragio efectivo, SÍ reelección”… la de él.
El reclamo de los opositores, el escándalo mediático, la parálisis legislativa, el desacuerdo expresado por la honrada Secretaria de Gobernación y el honroso rechazo presidencial calificando de “vergonzosa” la intentona de MORENA y secuaces hicieron que Porfirio reculara con enojo y grandilocuencia.
Acabó así la trapisonda de “usurpador”, “cínico” y “gandalla” contra el anciano multicolor, quedando para la historia (que ellos escribirán) los aplausos al “hombre de Estado”. Juzgue usted.
Por lo pronto, se frustró el “sí reelección”, y no hay duda que vamos requetebién.