Exigen no obligar cuotas ni comprar uniformes
Crisis. Legisladores tamaulipecos llamaron a la SEP a bajar órdenes a directivos para considerar el impacto al bolsillo
Un regreso a clases que no implique obligar a los padres de familia a pagar cuotas escolares ni comprar uniformes y útiles nuevos, exigen legisladores tamaulipecos.
El lunes 29 de agosto, después de dos años de medidas sanitarias para prevenir el covid-19, se retomará el modelo presencial al 100% en el país y estado.
Por tal motivo, piden a la Secretaría de Educación Pública del gobierno federal, bajar directrices donde se tome consciencia de la difícil situación económica que siguen enfrentando las familias.
Ante la Comisión Permanente del Congreso de la Unión, promovieron una iniciativa con punto de acuerdo los diputados Mariela López, César Rendón y Oscar Almaraz, para exhortar a la SEP a no lastimar la economía de las familias en el próximo regreso a clases.
Refieren que el poder adquisitivo en los hogares se ha visto muy disminuido como consecuencia de la inflación y los bajos salarios, de tal manera que es muy difícil cubrir necesidades básicas como la alimentación.
“El regreso a clases representa uno de los gastos más fuertes y preocupantes para las familias, tan solo el año pasado, se prevía que los padres gastaran desde 1,200 y hasta 2,000 pesos para poder cubrir el material que los menores necesitan y ahora que todo se ha encarecido es un desembolso mayor”.
Requisito ineludible
Por lo anterior, dijeron en su exposición de motivos, es necesario que la SEP establezca una política de regreso a clases económico, donde no se obliguen cuotas escolares, que aunque se denominan “aportaciones voluntarias” terminan siendo un requisito ineludible en los planteles educativos.
“No se puede condicionar a los niños su ingreso a las escuelas o la entrega de sus calificaciones a cambio de algún pago. Se debe también hacer cumplir la disposición de no exigir el uso del uniforme y muchos comprarlo nuevo, para no afectar los bolsillos de las familias”.
También se hace ver que es posible reciclar útiles escolares y con ello generar ahorros importantes, pero para que todo esto se haga realidad, es necesaria la intervención de la SEP.
La iniciativa fue turnada a comisiones para su análisis y posterior dictamen.