La verdad de la mentira
Murillo Karam pasará su juicio en prisión. La pregunta, no la respuesta, está en el aire: ¿Puede considerarse la desaparición y el asesinato de los 43 jóvenes de Ayotzinapa como un crimen de Estado? Gamés responde: definitivamente no ....
Gil observó el revuelo que causó la noticia: Jesús Murillo Karam, ex Procurador General de la República, fue arrestado después de que la Fiscalía lo acusara de “tortura, desaparición forzosa y obstrucción a la administración de la justicia”. Así ha resuelto la Comisión de la Verdad y el Acceso a la Justicia del Caso Ayotzinapa el asesinato de los 43 jóvenes normalistas de la Normal Isidro Burgos.
Unas horas antes, Alejandro Encinas se deshizo como pudo de los niños y de las niñas que le pedían regalos pensando que era Santaclos y dio a conocer el Informe de la Presidencia de la Comisión. Y concluyó categóricamente: “Crimen de Estado”, la “verdad histórica”: “privilegió la lógica jurídica”, sin considerar el respeto a los derechos humanos “construyendo una narrativa que forzó y manipuló el sistema de procuración de la justicia a fin de evitar una investigación profunda que permitiera conocer la verdad de los hechos, orientando la investigación del tema de secuestro y crimen organizado de autoridades y grupos delictivos locales”. Así dice el párrafo, no es culpa de Gamés, en la cobertura, muy completa, de su revista Proceso. Prisión preventiva, supone Gilga, Murillo pasará su juicio en prisión. La pregunta, no la respuesta, está en el aire: ¿Puede considerarse la desaparición y el asesinato de los 43 jóvenes de Ayotzinapa como un crimen de Estado? Gamés responde: definitivamente no.
Nuevos implicados
Si Gil ha entendido algo, cosa improbable, hay al menos dos novedades, que ya se sabían por cierto: el ejército no evitó la matanza y el ex gobernador del estado, Aguirre, tendrá que explicar y rendir cuentas por los hechos de la noche de Iguala. Así las casas, muletilla patrocinada por Manuel Bartlett, ¿dónde comemos, licenciado? 20 mandos militares, 5 autoridades administrativas y judiciales del estado de Guerrero, 26 policías de Huitzuco y uno de Cocula; más 11 policías estatales de Guerrero y 14 miembros del grupo criminal Guerreros Unidos. A Omar García Harfuch y otros mandos policiacos se les ha preparado una carpeta de investigación.
Por fin, el ex gobernador Aguirre tendrá que rendir cuentas. Ahora mal sin bien: subsecretario Encinas, una vez que usted ha alejado a los niños y niñas y noños. ¡Mira papá! ¡Santaclos! Hijo, deja tranquilo al subsecretario de Derechos Humanos. Decía Gilga que ya más libre de compromisos, subsecretario, usted podría tener un comentario acerca, muy cerca, del ex gobernador Aguirre pues ustedes eran miembros del PRD; el mismo Presidente, candidato eterno a la Presidencia, era el número uno del perredismo. Oigan, ya en serio, ¿quiénes eligieron al presidente municipal y permitieron que toda una ciudad fuera tomada por el crimen organizado que encabezaba Abarca con su esposa Pineda? Nada que decir, todos chiflan en la loma. Sí puede ser un crimen de Estado, pero del Estado de Guerrero. Los neoperredistas y ex perredistas nunca se sintieron aludidos por ese crimen.
Nunca es tarde para ensayar una explicación. ¿Cómo ve usted Santa?, perdón, subsecretario Encinas. Hay otros perredistas notables de aquel tiempo que en estos días son presencia importante en Morena, ya dijimos el presidente de la República, pero otros, vengan, ¿no van a decir esta boca es mía?
Mentira de la verdad
Dirán la misa los defensores del Grupo de Especialistas del Derecho Humano del Mundo Argentino, o como se llamen, pero a Gil le rompen las pelotas: durante un tiempo inexplicable, los asesinos confesos se encuentran en libertad y el investigador, con todos sus errores, lo que usted quiera, entra a prisión acusado por delitos que muy difícilmente le probarán, ¿un poco raro, no? Crimen de Estado, ¿el Estado es Murillo Karam torturando y desapareciendo estudiantes? Una nueva “verdad histórica” ha sellado de forma más bien penosa el caso de los jóvenes asesinados por el crimen organizado, la policía estatal, la policía federal, la omisión del Ejército con la complicidad del ex gobernador Aguirre, el silencio de todo un partido, el PRD, y la ineptitud de un presidente, Peña Nieto, entregado al oportunismo y la ineptitud.
Todo es muy raro caracho. Como diría Antonio Machado: “La verdad es lo que es, y sigue siendo verdad aunque se piense al revés”.
A Omar García Harfuch y otros mandos policiacos se les ha preparado una carpeta de investigación