Milenio Tamaulipas

Otra ronda, ¡hic! UNO HASTA EL FONDO

Los jóvenes ricachos, influyente­s, alegres y, como dicen los poetas, hasta el huevo, de Movimiento Ciudadano se divierten y se graban para lucirse en las redes; chido, chidísimo, wey… Les gusta la fiesta, el trago, el grito, la juventud

- Gil.games@milenio.com Gil s’en va

AGil le gusta la fiesta, faltaba más. Hic. Y no le teme al qué dirán, hic. Que viva el desmadre y no se hagan los de la boca chiquita. Mesero, hic, traiga lo mismo, pero mejor. Pero dicho sea de paso y pasa, no suele grabarse cuando se encuentra incróspido. En cambio, al gobernador de Nuevo León, Samuel García, al candidato de Movimiento Ciudadano a la Presidenci­a, Jorge Álvarez Máynez, y amigos que los acompañan les gusta grabarse cuando traen sus buenas rondas entre ceja y ceja. Ya no puedo ni hablur.

Así se han puesto a circular en redes sin recato alguno mientras ven un juego de los Tigres en el estadio de la Universida­d de Nuevo León, hic, los jóvenes ricachos, influyente­s, alegres y, como dicen los poetas, hasta el huevo, de Movimiento Ciudadano. Se divierten y se graban para lucirse en las redes, chido, chidísimo, wey. Dice Álvarez Máynez: “¡Pato! Saludos a Beltrones, ay, papá, no te la vas a…”. El joven y alivianado gobernador García dice: “Corleone, el presidenci­al, ya le dicen el Corleone”. “¡Véngase, Guiñac! Multa del INE”. Qué buen desmadre.

Papá dantesco

Estos son los jóvenes de Movimiento Ciudadano, un partido distinto, con futuro. Oigan: va a venir papá Dante a regañarlos. Ya, muchachos baquetones, ¡orden! Ideas políticas, ¿a quién le importan?, cargos públicos, no manchen, qué pex. Les gusta la fiesta, el trago, el grito, la juventud. Acaso por eso le regalaron a Morena su partido y los puntitos que traerá Álvarez Máynez. Ah, la juventud dorada; ah, el góber joven que brinda y destapa al candidato de su partido con sus buenos tequilas. Que les aproveche. Ellos son los chavos buena onda y la verdad sea dicha, no han sido ellos quienes destruyero­n MC, fue

Dante Delgado quien les dio tres vueltas a los chavos. Y que venga otra ronda. Venga Álvarez Máynez, usted va bien.

Gil se llevó los dedos índice y pulgar al nacimiento de la nariz y caviló: lo deseable sería que MC desapareci­era, que no obtuviera el registro. Así terminan de hacerle la chamba a Liópez. Ay, papá. Venga otro tequila.

“Las Golondrina­s”

En la conferenci­a mañanera, el presidente Liópez anunció que su siguiente libro saldrá la próxima semana, un texto dedicado a los jóvenes, su “retiro por anticipado al término de mandato”.

Música de “Las Golondrina­s”. Qué tristeza: se nos va, don Susanito, se nos va. El Presidente aseguró que ya había escrito mucho sobre las diversas etapas del movimiento que lo llevó a ganar la Presidenci­a, por lo que el método para articular este libro se centra en lo único que le falta narrar, el final de su mandato.

Con los ojos llenos de lágrimas, Gilga leyó: “Solo debía darle continuida­d a mi último texto A la mitad del camino, que describe lo alcanzado en los primeros tres años, únicamente faltaba narrar el final de mi mandato”.

El mandatario (ya quedamos en que a Gil le gusta escribir mandatario) también reconoció que este texto está dedicado a los que entren en el relevo generacion­al, a los jóvenes que seguirán en la construcci­ón de una “patria libre, digna y cada vez más humana”. Se nos va, Jesús, se nos va; se nos va, Jenaro, se nos va; se nos va, Carmeeen, se nos va. Un grito estremeced­or hizo añicos el silencio del amplísimo estudio: Ay, mis hijos, se nos va.

Oigan, bueno, lean estas estremeced­oras palabras: “Es mi último libro sobre política y necesitaba reiterar acerca del pasado para llegar a comprender mejor el porvenir, no hay texto sin contexto y tampoco los procesos políticos y sociales son fruto de un largo camino”. Ah, que aforista impar.

“Con este texto dirigido a los jóvenes, porque a los jóvenes se los estoy dedicando, me retiro por anticipado; al término de mi mandato me iré con la satisfacci­ón de haber cumplido y el criterio de que no debemos tener demasiado apego ni al dinero ni al poder”.

Más música de “Las Golondrina­s”. Se nos va. Ya de por sí deja la Presidenci­a en octubre y ahora se despide de todos nosotros,

_ que lo queremos tanto, en las páginas de un libro que desde ya es inolvidabl­e.

Todo es muy raro, caracho, como dirían en el palco del góber jovenazo: “Mesero, la cuenta ya perdida, y que la pague el góber”.

Lo deseable sería que MC desapareci­era, así terminan de hacerle la

chamba a Liópez

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