La policía adelanta el informe del caso Gray
La Fiscalía de Maryland recibe el dictamen “urgente” sobre las condiciones de detención en Baltimore del joven negro que murió siete días después
La policía de Baltimore, en Maryland (este) entregó ayer a la Fiscalía del estado los resultados de su investigación por la muerte de un joven negro de 25 años tras ser detenido, hecho que ha provocado disturbios y manifestaciones que el miércoles se extendieron a otras ciudades de la costa este de Estados Unidos.
El comisario de la policía de Baltimore, Anthony Batts, dijo a periodistas que un equipo de investigadores entregó el resultado de una evaluación “urgente” de los eventos que rodearon el arresto de Freddie Gray, el 12 de abril, y su deceso el día 19 tras caer en estado de coma. “Entiendo la frustración, entiendo la sensación de urgencia, y también lo ha hecho la organización, y por eso hemos acabado (la recopilación) un día antes del tiempo”, expresó Batts. La entrega de pruebas estaba inicialmente prevista para el 1 de mayo.
Según el procedimiento, corresponde ahora a los fiscales decidir si se acusa a alguien en relación con la muerte de Gray, quien falleció en un hospital tras sufrir severas lesiones en la columna vertebral mientras se encontraba bajo custodia policial.
El hecho desató graves disturbios en Baltimore el lunes tras el funeral del joven, y el miércoles las protestas se extendieron a Nueva York, Boston y la capital Washington.
Las protestas estallaron con fuerza en Baltimore — ciudad portuaria de 620 mil personas— pero también se esparcieron a Filadelfia, la más reciente ciudad del este en sumarse a los reclamos, donde unas 600 personas se congregaron para pedir justicia.
En Nueva York, 143 personas resultaron detenidas la noche del miércoles en la marcha convocada bajo el lema “NYC se moviliza y apoya a Baltimore”, según un nuevo balance de la policía dado a conocer ayer.
En Baltimore, donde la alcaldesa negra Stephanie Rawlings-Blake impuso el toque de queda desde el martes, la situación estuvo más tranquila, con 18 detenciones durante la jornada del miércoles.
Rawlings-Blake indicó ayer que la necesidad de mantener el toque de queda se evaluará día a día. “No quiero más muertes en las calles de Baltimore a causa de la violencia”, aseveró.
El lunes, los disturbios dejaron más de 140 vehículos incendiados, 20 policías heridos, 250 sospechosos arrestados y cientos de comercios saqueados en la ciudad.
Freddy Gray es la última víctima negra a manos de la policía de una serie de casos similares registrados en Estados Unidos desde hace un año.
En agosto de 2014, un policía blanco disparó y mató a un adolescente negro en San Luis, un suburbio de Ferguson (Misuri), lo que provocó manifestaciones en las principales ciudades del país.
Se ignora cuándo hará público la Fiscalía de Maryland el informe policial, pero ayer la WJLA, una filial de la cadena de televisión ABC, citó fuentes policiales “múltiples” que adelantaron que un médico forense determinó que la lesión de la médula que le costó la vida a Gray fue producida cuando éste se estrelló contra la parte trasera de la furgoneta de la policía tras su detención, rompiéndose así su cuello. m