Acusan a minera de contaminar agua
Habitantes de Mazapil reportan diversas enfermedades y advierten que la canadiense Gold Corp extrae selenio a cielo abierto; piden indagatoria
La Coordinadora Nacional Plan de Ayala acusó a la Minera Peñasquito, perteneciente a la transnacional canadiense Gold Corp e instalada desde 2008 en el municipio de Mazapil, de generar altos niveles de contaminación por selenio y otros metales en mantos acuíferos de la zona, los cuales han generado problemas de salud entre la población.
Por ello, exige una investigación internacional a fondo tanto a la empresa como a las dependencias federales mexicanas, pues es claro que “hay un contubernio y corrupción porque no se ha cumplido con el reglamento preestablecido en la ley ambiental”.
Felipe Pinedo Hernández, a nombre de la CNPA y del Frente Popular de Lucha de Zacatecas (FPLZ), aseguró que existe un contubernio histórico entre la transnacional y sus filiales en México con la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) y otras instancias encargadas de regular el medio ambiente. “Siempre hemos tenido la razón al estar denunciando la forma de explotación, porque Peñasquito no solo ha contaminado desde hace años con selenio, sino con arsénico, plomo, mercurio y flúor, lo que significa que el método que utiliza en sus lixiviados ha rebasado los niveles permitidos y está matando a la gente”, reiteró.
Por ello, se observan diversos problemas de salud entre la población, como la caída del pelo, de uñas y dientes. Además, se reportan daños severos en la tiroides y el sistema inmunológico y daños al duodeno, aparato digestivo, hígado y pulmones, a causa de la selenosis e ingesta crónica.
Pinedo Hernández afirmó que estas son las consecuencias que han derivado de la explotación a cielo abierto que siempre ocultaron, pues el selenio es peligroso con altos niveles de daños permanentes a la salud.
Aseveró que se ha extendido la contaminación a los mantos freáticos, sobre todo los que están cerca de la presa de jales en las comunidades Cerro Gordo, Cedros, Matamoros y El Vergel, que convergen a la minera y que rodean el agua con un alto riesgo contaminante.
Por ello, se exige una investigación profunda a la minera y a las instancias de protección ambiental. Ello, en función de varios acuerdos internacionales para prevenir la contaminación, como la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) y el Grupo de Trabajo de la Mesa del Atlántico Norte, entre otras.
Felipe Pinedo advirtió que el peor de los casos, de no tomarse medidas drásticas internacionales, significará la muerte masiva de la gente de las comunidades del semidesierto zacatecano. “Hacemos responsable a la empresa porque de los jales desemboca en un colapso de riesgo total de muerte a la población, por la principal fuente de contaminación a causa de los métodos equivocados de la explotación de metales pesados y peligrosos que contaminan las aguas fósiles de la región”, advirtió Pinedo.
Finalmente, dejó en claro que la CNPA exige la indemnización y cumplimiento para mitigar en el impacto ambiental y que se informe de los riesgos a la población, porque no es posible que durante tres años apenas salga a la luz esta información que agudiza el riesgo latente de contaminación y daños severos a los habitantes, y que generará un efecto multiplicador negativo y trágico.
COMPAÑÍA MONITOREA LA ZONA
En un comunicado oficial emitido por la empresa Goldcorp propietaria de Minera Peñasquito confirmó que, en octubre de 2013 a través de su sistema de pozos de monitoreo, en Peñasquito se detectó un aumento en la concentración selenio y sulfatos provenientes de la presa de jales.
El selenio es un elemento que está presente en la corteza terrestre, en Peñasquito está asociado a los minerales que contienen azufre. Así que dicho elemento entra al proceso de extracción y finalmente es depositado en la presa de jales.
El comunicado formal indica que de hecho el sistema de pozos de monitoreo tiene como principal función detectar de manera temprana cualquier cambio en la composición del agua, con la finalidad de identificar y corregir patrones dentro de la operación.
Desde la detección inicial de la presencia de selenio, en octubre de 2013, la empresa ha intensificado el monitoreo, y realizado un plan de contención que incluye el mantenimiento de los subdrenes de la presa de jales, mantenimiento a las piletas de recolección, relocalización de la pileta de reclamo, etcétera.
Es importante mencionar que de acuerdo con la postura de la empresa Goldcorp se han realizado varios estudios sin encontrar evidencia de impactos o filtraciones más allá del límite de Peñasquito, aseguraron.
Por lo tanto, tampoco hay evidencia de afectación en el agua de uso de las comunidades, ni en el agua potable ni la flora y fauna o en la población.
El documento indica que en apego a las leyes y normas ambientales, Peñasquito dio aviso del hallazgo a la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) y a la Comisión Nacional del Agua (Conagua) mediante una notificación de los parámetros clave que registraron la presencia selenio, sin ningún cambio notable en la calidad del agua. M