Llega la experiencia Apple al estilo de Jobs
La primera tienda oficial de la firma de la manzana abre en la CdMx bajo el mismo concepto que concibió Steve hace 15 años
Steve Jobs abrió la primera tienda oficial de Apple en 2001, mucho antes del éxito de los iPhones o las iPads, y en ese momento muchos pensaron que era un locura hacer una tienda de productos exclusivos de una marca, teniendo a todos los demás gigantes del retail que podían distribuir, exhibir y vender dichos artículos. Pero Steve pensaba diferente, como el viejo eslogan de la empresa, y su objetivo era vender pero al mismo tiempo crear una experiencia única para el usuario, que lo hiciera sentirse no solo satisfecho con su compra, sino parte de lo que compraba y especial.
Quince años después, las Apple Store son las más exitosas en el mundo geek, no solo por los gadgets que venden , sino por el diseño de cada tienda como el de la quinta avenida en Nueva York, o la recién inaugurada en Union Square en San Francisco, así como el detalle de cada mesa, anaquel y el servicio de los que ahí trabajan, que dan una experiencia de usuario tal que es como ir a pedir un Starbucks personalizado, pero en vez de café te llevas una iMac o una iPad Pro.
Este sábado se inauguró la primera tienda Apple Store de México, y aunque existen ya un par en Brasil, no hay otra en un país de habla hispana en el continente. La duda que ha surgido entre el consumidor es cuál es la diferencia con las ya existentes iShops y MacStore en México, pues desde hace años existen esas tiendas donde se venden los productos de la compañía, pero éstas son solo premium resellers, es decir, lugares que tienen el aval para vender los artículos de Apple, pero no son operados directamente por la compañía de la manzana.
La Apple Store que se encuentra en el centro comercial Vía Santa Fe, en la Ciudad de México, es un lugar donde no solo se venden los iPhones, las Macbooks o los accesorios para estos gadgets, sino que como sello particular tiene todo el estilo y cultura de Apple que ha caracterizado a sus tiendas en todo el mundo, con detalles como la Genius bar, donde expertos en cada producto dan asesoría personalizada a los clientes sobre cualquier producto o servicio. “En Apple creemos que la Ciudad de México es uno de los mayores centros neurálgicos, no solo a nivel económico, sino también a nivel cultural, de todo Latinoamérica. Creemos que la creatividad y la innovación que está ocurriendo en Ciudad de México es muy importante y por tanto es un compañero natural para Apple”, afirmó Enrique Atienza, director ejecutivo de Retail de Apple para Latinoamérica, previo a la inauguración.
Para lograr que esa experiencia de compra sea igual que en otras tiendas Apple, los empleados fueron escogidos de manera minuciosa. “Cuando abrimos la oferta de trabajo recibimos ocho mil solicitudes, entrevistamos personalmente a dos mil personas y de ahí escogimos a los mejores 200 para formar el equipo de asesores, vendedores y expertos”, dijo Atienza.
Estos genius, como les llama Apple, son en su mayoría bilingües, algunos trilingües, y otros son profesionales de la fotografía o la cinematografía, de tal suerte que, más allá de cerrar una venta, buscan lograr que el usuario se lleve un producto que cumpla con sus expectativas.
Desde muy temprano la mañana de este sábado, cientos de fanáticos de la firma de la manzana se congregaron a las afueras de la tienda y minutos antes de las 11 de la mañana los vendedores salieron para animar el ambiente. Al grito de “¡México, México!” y entonando el Cielito Lindo, los asistentes esperaron los últimos minutos para vivir la experiencia que ofrece la Apple Store, que finalmente abrió sus puertas.
Mesas de madera con zona táctil, sala de juntas con diseños zen, trato personalizado y productos exclusivos en México fueron algunas de las sorpresas que dieron la bienvenida a los clientes en esta unidad, que ofrecerá otras ventajas como cursos gratuitos para todas las edades. Atienza había dicho que con esta tienda pretenden “que la cultura de Apple y la de México se unan de forma simbiótica”. Al menos el primer día, lo lograron. m