Conan rompe las fronteras y graba su programa en México
El conductor realizó ayer su show, en el cual predominaron las referencias contra Donald Trump; Diego Luna, uno de sus invitados, dijo que en México “se está en una resistencia pacífica”
Conan O’ Brien recorrió la capital durante una semana y en su paso por varios rincones de México visitó la calle Madero del Centro Histórico, acudió a Coyoacán, probó las mieles del éxito en la lucha libre, apadrinó a una quinceañera, jugó futbol con Giovanni Dos Santos y ayer entrevistó a Diego Luna, al ex presidente Vicente Fox Quesada, a la standupera Sofía Niño de Rivera y al chef Aquiles Chávez.
El conductor estadunidense estuvo en Televisa San Ángel para grabar su especial Conan sin fronteras, Hecho en México y durante todo el día ocupó el foro 3 para efectuar su late show donde predominaron las referencias contra el presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
Los sketches que realizó en distintas partes de la Ciudad de México, fue donde más se mostraba el disgusto de los mexicanos por el republicano, gracias al sentido del humor que les imprimió.
El crew, el público y los invitados eran mexicanos. Hubo fanáticos que llegaron desde Monterrey, Tijuana, Ciudad Juárez, Morelia y otros de Chicago, Estados Unidos y Caracas, Venezuela. Todos esperaron horas para entrar al show y fueron despojados de sus celulares para guardar los secretos que se grabaron para el programa.
Televisa San Ángel, donde de por sí es complicado entrar sin un memorándum, ayer se convirtió en un búnker porque la seguridad que había parecía para una visita de Estado.
Pero para los invitados valía la pena resistir lo que fuera, con tal de ver al conductor.
Cuando Conan llegó a su set, el cual se montó para su show, la locura se desató al ver al estadunidense de 1.93 de altura saludando a la multitud. Previamente, había ensayado con su equipo. Ahí estaba la banda Calibre 50, que musicalizó el programa, y los invitados especiales aguardando su turno en backstage.
Su productor estaba al pendiente de cada detalle y los camarógrafos ponían atención a cada indicación, parecía que el episodio se estaba grabando en Burbank, California, donde normalmente efectúan cada programa, pero no, esta vez era en Televisa haciendo una emisión para televisión de paga que se transmitirá en Estados Unidos el 1 de marzo por la cadena TBS.
Conan jugaba con los asistentes entre cortes y respondía los piropos, no importando si fueran hombres o mujeres, quienes le mostraban su admiración. Además agradeció al inicio y al final la hospitalidad de los mexicanos.
Con Diego Luna, su primer invitado, se confesó: dijo que venía a México, primero por sexo, y segundo para traer positivismo. Ambos hablaron de Star Wars: Rogue One y el tema obligado Donald Trump, del que el actor dijo, en México, “se está en una resistencia pacífica”.
Después llegó el chef Aquiles Chávez, con quien preparó una margarita, guacamole con aguacates mexicanos y pulpo en su tinta con la que le pintó bigotes “para parecer un mexicano”.
En la segunda parte de la grabación llegó el ex presidente, Vicente Fox, con su singular vena cómica y Sofía Niño de Rivera, famosa por sus stand ups. Fue un ambiente de paz, donde predominó la concordia y el apoyo, entre dos naciones.