Indigentes de Artículo 123 se refugian en el Palacio Chino
La directora de Servicios Urbanos de la delegación Cuauhtémoc, Aliza Chelminsky, afirma que son los mismos que vivían en el otro campamento
Cerca de las 8 de la noche comienzan a llegar al lugar e impiden el paso peatonal
Después de un mes y medio de que el Gobierno de Ciudad de México desalojara a los indigentes que ocupaban un espacio en la calle Artículo 123, entre Humboldt y avenida Balderas, colonia Centro, aproximadamente 10 personas se han instalado en las puertas del complejo de cines Palacio Chino, que se encuentra cerrado.
Este lugar, ubicado en Iturbide, a dos calles de donde se encontraba el anterior campamento, comenzó a ser refugio de indigentes desde hace poco más de 15 días, pues el complejo dejó de dar servicio a finales de agosto de 2016, según informó la empresa Cinemex.
Durante un recorrido que realizó MILENIO, se observó que en el lugar hay botellas de bebidas alcohólicas vacías, cobijas, cajas de cartón y otros materiales con los que crean de nuevo un albergue.
Asimismo, se corroboró que cerca de las 8 de la noche los indigentes arriban a ese lugar para pernoctar, y al extender sus pertenencias en la banqueta impiden el paso peatonal.
Se observó que muchas de esas personas se drogan con solventes, ya que traen la llamada mona.
Vecinos y trabajadores del lugar temen que la inseguridad se apodere de la zona porque “muchos de los indigentes se han visto envueltos en casos de narcomenudeo”, por lo que han tomado precauciones y procuran salir antes de que anochezca.
También mostraron preocupación por que el lugar se convierta en algo similar a Artículo 123, que era “intransitable”, lo que afectará económicamente los locales de venta de comida y revistas.
El pasado 8 de febrero, autoridades capitalinas desalojaron a 28 personas en situación de calle, 23 hombres y cinco mujeres, que ocupaban Artículo 123, pese a que en más de tres ocasiones, en años anteriores, fueron retirados y sometidos de manera voluntaria a tratamientos de desintoxicación.
Un total de 11 personas aceptaron ser trasladadas a la Unidad Toxicológica de la delegación Venustiano Carranza, a bordo de camionetas del Instituto de Asistencia e Integración Social del gobierno capitalino.
Además, elementos de la Procuraduría capitalina detuvieron por tráfico de drogas a cinco personas.
Son los mismos
La directora general de Servicios Urbanos de la delegación Cuauhtémoc, Aliza Chelminsky, confirmó que esas personas formaban parte del campamento de Artículo 123, y señaló que de las 11 que aceptaron desintoxicarse, “solo dos continúan, el resto desertó”.
Asimismo, dijo que lo que falta es reforzar las estrategias de inducción y acompañamiento que ofrecen las autoridades delegacionales y del gobierno central, porque “tienen la sensación de que los botan y no les dan continuidad. “Están en el Palacio Chino, efectivamente. Estamos en contacto con los vecinos para tratar de evitar que se forme otro campamento. Ahí lo que vemos es que falta trabajo de inducción para que acepten un tratamiento. “En el momento que llegan y quitas un campamento, quizá ante el shock algunos aceptan el tratamiento, pero no están convencidos, por lo que desertan en la primera oportunidad”, explicó la funcionaria delegacional.
Chelminsky dijo que atender a este sector de la población es difícil, porque es un “tema que tiene que ver más con emociones y la gente viene muy dañada por drogas”, por lo que deben sentir que hay camino para delante, es decir, que tienen futuro.
Aseguró que después del desalojo por parte de las autoridades centrales, “hay una sensación de que ya le toca a la delegación”, pero pidió continuar sumando esfuerzos entre ambos gobiernos para utilizar de manera adecuada el “Protocolo interinstitucional de atención integral a personas en riesgo de vivir en calle e integrantes de las poblaciones callejeras de Ciudad de México”. “Hay algunos puntos que debemos mejorar como el programa de inducción, de convencimiento y de las brigadas, ya que no están funcionando bien. “Falta esa convicción de que este es un tema que deben llevar juntos, no de ‘yo ya hice lo que tenía que hacer y ahora le toca a la delegación’. Los recursos y el protocolo tienen dueño y se deben ejercer correctamente”, expresó la funcionaria.
Chelminsky dijo que pedirá mayor vigilancia en las calles y en breve abrirá sus puertas el centro comunitario Casa de Arte y Cultura para la Vida, que ofrecerá opciones culturales y de trabajo a personas en situación de calles para su reinserción a la vida social. M