La baja de calificación (downgrade)
Los riesgos y noticias más destacadas que más impacto han tenido para México son: 1. Alza de tasas de interés de la Fed. El banco central más poderoso del mundo ha entrado en un proceso de alza que lleva ya dos años y medio, y puede durar otros tres o cuatro. Subir la tasa es la mejor receta para combatir la inflación; al incrementar el costo del dinero la gente paga más caros sus créditos y tiene menos ingreso para gastar, por lo tanto consume menos y con ello le quita presión al alza de precios o inflación; esto ha fortalecido al dólar porque al subir las tasas allá, regresa mucho dinero que había salido (a EU), por lo que se devalúan las monedas y se aprecia el dólar. Hoy seguramente aumenta la tasa 0.25 por ciento, para llevarla a 1 por ciento, pudiendo llegar al final de este ciclo a 3 o 3.5 por ciento. Cuando esto ocurra se presionará el peso y veremos volatilidad; cada incremento de tasa en México encarece el servicio de la deuda interna y externa.
2. Precios del petróleo bajos. Espero que ya hayamos visto lo peor —la mezcla mexicana por debajo de 20 dólares—, aunque estos últimos días, después de haber gozado de estabilidad, regresa por debajo de 50 dólares; en junio la OPEP se reunirá de nuevo para ver si acuerda continuar con el pacto de extraer cuotas establecidas, para no generar sobreoferta y un nuevo desplome en los precios. El costo ha bajado porque gracias al alza nuevas plataformas en EU han reabierto sus operaciones y con ello han subido la oferta e inventarios. México ya no es un exportador de petróleo, pero sí seguimos siendo fiscalmente dependientes de Pemex: vuelvo a lo mismo, sin reforma fiscal no vamos a ningún lado.
3. Donald Trump. Sus amenazas de modificar el TLC nos tienen menos nerviosos y miedosos que antes, pero no se ha acabado el tema. Declaraciones de miembros de su equipo nos devuelven esperanza, así como modificaciones que, incluso, podrían beneficiarnos más.
La tensión en la relación ha bajado poco, también la idea del muro y pasarnos la factura se ha debilitado; al final la cosa ha mejorado, pero puede ser solo transitorio.
4. Deterioro de las finanzas públicas. Este es local y de manufactura propia; en seis años pasamos de deber 29 por ciento del PIB a 48 por ciento, la recaudación sigue siendo pésima (13 por ciento del PIB); repito, sin gravar el consumo, no vamos a ningún lado.
Estos cuatro puntos desafortunadamente son razones suficientes para que las calificadoras nos bajen la evaluación un nivel, y no tengamos suficientes argumentos para defendernos; descenderíamos un escalón y aún mantendríamos el grado de inversión, con lo cual se podría tener un tipo de cambio arriba de 20.50 pesos.
Espero estar equivocado y que los puntos 2, 3 y 4 mejoren, cosa que es posible; el 1 es inamovible y difícilmente cambiará.