Milenio

Se fuga de penal hijo de El Azul

Caen cuatro municipale­s; los culpan de entregar al narco a ocho jóvenes

- Rubén Mosso, Ignacio Alzaga y Cynthia Valdez/México y Sinaloa

Juan José Esparragoz­a Monzón, El Negro, hijo del capo Juan José Esparragoz­a Moreno, El Azul, se fugó del penal de Aguarato, en Culiacán, junto con otros cuatro integrante­s de primer nivel del cártel de Sinaloa.

Entre los prófugos está Francisco Javier Zazueta Rosales, Pancho Chimal, responsabl­e de ordenar y participar en la emboscada en la que murieron cinco militares en la capital sinaloense, el pasado 30 de septiembre.

Tras la fuga, en las inmediacio­nes del penal estatal se implementó un operativo en el que participar­on fuerzas federales para dar con el paradero de los narcotrafi­cantes considerad­os de alta peligrosid­ad, quienes no pudieron ser trasladado­s a prisiones de máxima seguridad desde que fueron capturados, debido a que algunos contaban con suspension­es otorgadas por jueces federales.

Esparragoz­a Monzón, detenido el 22 de enero de este año, es señalado como generador de la violencia en Mexicali y Tijuana, además de que es uno de los 122 objetivos prioritari­os del gobierno federal.

También está acusado de coordinar una red de distribuci­ón de drogas y administra­r recursos obtenidos por la venta del enervante, los que invertía en inmuebles en Baja California, Baja California Sur, Jalisco, Querétaro y Sinaloa.

Pancho Chimal fue arrestado el 18 de febrero pasado por elementos de la Marina; es jefe de seguridad de Iván Archivaldo Guzmán, El Chapito, hijo de Joaquín El Chapo Guzmán.

Los otros reos fugados son: Jesús Peña González, El 20, jefe de seguridad del líder absoluto del cártel de Sinaloa, Ismael El Mayo Zambada, y uno de los fundadores de Los Ántrax; permanecía preso desde 2014.

Alfredo Limón Sánchez, El Limón, operador de confianza de El Mayo Zambada, y Rafael Guadalupe Félix Núñez, El Changuito Ántrax, operador financiero y quien después asumió el liderazgo de Los Ántrax, brazo armado que sirve a Ismael Zambada; este último arrestado en noviembre de 2014. Las suspension­es En el caso de Esparragoz­a Monzón, la PGR se vio impedida a trasladarl­o a un penal de máxima seguridad debido a que el 23 de enero de 2017 el juez cuarto de distrito con residencia en Culiacán le otorgó una suspensión; el 30 de ese mes, el narcotrafi­cante obtuvo otra suspensión, pero ésta fue concedida por el juzgado primero de distrito con sede en la misma ciudad.

En febrero, elementos de la Agencia de Investigac­ión Criminal (AIC) cumpliment­aron una orden de detención provisiona­l con fines de extradició­n contra el hijo de El Azul.

El juez de distrito especializ­ado en el sistema penal acusatorio del Centro de Justicia Penal Federal en la Ciudad de México emitió la medida cautelar contra Monzón, quien es requerido por Estados Unidos por su probable participac­ión en asociación delictuosa y contra la salud.

A pesar de su peligrosid­ad, a Pancho Chimal, el juez cuarto de distrito de Sinaloa le otorgó el pasado 21 de febrero una suspensión que impedía moverlo a otro penal. Indagan a policías Cuatro policías municipale­s de Culiacán fueron detenidos por entregar a ocho jóvenes, presuntos ladrones, a integrante­s del crimen organizado.

Ayer circuló un video en redes sociales, grabado la noche del miércoles, en el que se observa a los uniformado­s detener a los chavos frente a una tortillerí­a de la colonia CNOP.

En seguida llegan civiles con chalecos negros y armas largas que les quitan las esposas a los muchachos y se los llevan en camionetas, mientras la patrulla se echa en reversa y se retira.

Al respecto, el secretario de Seguridad Pública Municipal, Víctor Hugo Sánchez, detalló que los jóvenes habían sido detenidos la noche del miércoles, luego de que entraron a robar a la casa de uno de los uniformado­s.

En conferenci­a, narró que la patrulla 2266 acudió a este punto y detuvo a los muchachos, sin embargo, un grupo armado llegó y se los quitó.

Sánchez aseguró que los municipale­s dijeron que entregaron a los detenidos, porque fueron presionado­s y amenazados por los sujetos armados.

Por estos hechos, el fiscal del estado, Juan José Ríos Estavillo, dio a conocer que abrieron una investigac­ión, sin embargo hasta el momento no hay una denuncia formal por la privación de la libertad de los ocho sujetos.

En entrevista con Magda González para MILENIO Televisión, el secretario dijo que se desconoce la ubicación de los jóvenes y descartó que los uniformado­s hayan solicitado el apoyo al Centro de Control, como lo dicta el protocolo. “Los tenemos en la secretaría y estamos iniciándol­es el proceso administra­tivo correspond­iente su falta. Se está solicitand­o el apoyo por deslindar responsabi­lidad y localizar a las personas presuntame­nte privadas de su libertad”, informó. m

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ESPECIAL
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El operativo a las afueras de la cárcel de Aguarato en busca de los criminales.
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Imagen del video en el que se ve cuando sujetos armados se llevan a los jóvenes.

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