El Festival Internacional Filux iluminará Mérida
Cuando amo a alguien profundamente, algunas veces quiero ser esa persona, fundirme con ella; por lo tanto esta obra nos lleva a imaginar que nos convertimos en la persona amada”, señala Tae Gon Kim en la semblanza de Vestidos, escultura de luz instalada en el Museo Regional de Antropología de Yucatán, Palacio Cantón.
Esa pieza, junto con otras 14 propuestas de artistas locales y extranjeros, forman parte del Festival Internacional de Luces Filux, que se realiza por primera vez en Mérida, Yucatán, hasta el 26 de marzo.
Parques, museos, fachadas de edificios históricos y emblemáticos de la capital de la entidad serán los lienzos donde artistas multidisciplinarios reflejarán el abanico de posibilidades para hacer arte a través de la luz.
“En el festival hay proyecciones, esculturas, mapping, láser, sombras e instalaciones de artistas que utilizan la luz como eje rector, pero también hay piezas de gente que trabaja con vidrio, con cerámica. En el caso de Mérida, vimos que hay bastante producción y que hay creadores que abordan el tema de la luz de diferentes maneras”, explicó David Di Bona, director general de Filux.
Aunque hay una relación interesante entre la luz, el mundo maya y la astronomía, Di Bona destaca que se trata de un festival contemporáneo: “No todo tiene que ver con la historia y la tradición; también hay piezas como la de Kanek Gutiérrez (Oscuridad), quien retoma una frase del libro sagrado del Popol Vuh, que reflejan esa identidad”.
Filux impulsa el talento local: la mayoría de las obras son de artistas meridanos. “Es una experiencia de más de un año de trabajo con instituciones, escuelas de arte y comunidades. Esa tarea la hacemos todo el tiempo, el objetivo es posicionar a los virtuosos locales en el circuito internacional. Tiene que ver con descubrir nuevos talentos, ir aprendiendo como festival qué es lo que se está haciendo en cada lugar e impulsar una comunidad artística”.
El festival parte de la programación de la celebración de la Capital Americana de la Cultura y por el 475 aniversario de Mérida; propone hacer un recorrido familiar y nocturno durante cuatro días por diferentes sitios y espacios públicos para encontrar “obras de arte que no se ven habitualmente”. m