Bronco tiene nuevo comienzo en familia
Lupe Esparza integró a la alineación de la banda a sus dos hijos, José y René
Con la muerte de Choche y el retiro de Javier Villarreal de su alineación, Bronco se encontraba en la disyuntiva de retirarse o buscar una nueva fórmula, pero el amor que Lupe Esparza tiene por la música, lo obligó a buscar un nuevo comienzo en el que se involucraron sus hijos: José y René.
“Yo no lo pensé jamás ni fue planeado. Creo que en Bronco estábamos en una etapa de pensar en retirarnos. Con la partida de Choche y el retiro de Javier podríamos habernos ido a casa llenos de gratitud, pero creo que cuando amas tanto algo es difícil dejarlo y se convierte en una adicción.
“Vi a los muchachos que estaban picando piedra con un grupito que tienen, porque todos los inicios son difíciles, no importa que seas hijo de quien seas, eso no cuenta, al contrario, parece que estorba más. Los integramos y aquí estamos siguiendo el camino mientras tengamos ese deseo de conquista”, explicó en conferencia Lupe.
Para José y René integrarse a Bronco en la guitarra y el bajo, respectivamente, es un honor y prometen pagar con su talento la oportunidad de formar parte de la historia de la agrupación que les lleva por delante más de 35 años de trayectoria.
“Estuvimos picando piedra en un grupo que se llama Trotamundos, que encabezábamos mi hermano y yo. Nos sentimos muy contentos por esta etapa y muy agradecidos con mi padre por habernos dado esta oportunidad. Estamos concientes del compromiso que nos viene y es algo que estamos haciendo con muchas ganas y respeto para todos los fans que siguen la trayectoria de Bronco”, declaró José.
“Estamos muy contentos de compartir el mismo escenario y el mismo sueño con mi padre. Estamos profundamente agradecidos con ellos. Nuestra labor es seguir haciendo música de Bronco para muchos años más, con mucho amor y cuidando ese estilo que siempre ha caracterizado a la banda”, agregó René.
Recientemente Bronco se presentó ante más de 50 mil personas en el Vive Latino. Lupe confiesa que entraron al escenario con temor, pues presentarse frente a decenas de jóvenes los hacía sentir fuera de su hábitat; sin