PATENTE “SALVADORA DE LA HUMANIDAD”
Usan nanopartículas contra las infecciones hospitalarias
“Una persona entra por una operación de rodilla y termina enferma de neumonía”: Sergio León
Los hermanos Sergio y Gabriela León Gutiérrez diseñaron una serie de productos basados en nanopartículas que destruyen de manera selectiva el material genético de microorganismos que circulan en los hospitales y por el cual la Organización de Naciones Unidas (ONU) reconoció a su empresa entre “las 100 que salvarán a la humanidad”.
Los León Gutiérrez obtuvieron el 13 de julio de 2016 la patente de esa tecnología por parte del Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI) y la protección intelectual en 140 países de los productos que van desde desinfectantes para superficies, hasta esterilizantes de instrumental médico y antisépticos de la marca Évite.
En México, las infecciones que adquieren los pacientes durante su internamiento en hospitales provocan alrededor de 40 mil decesos y gastos por 38 mil 500 millones de pesos anuales debido al uso de productos de limpieza e higiene incapaces de destruir patógenos, de acuerdo con la investigación de Gabriela, que es ingeniera bioquímica, y Sergio, diseñador industrial y director de la empresa Gresmex.
Invento probado El invento de los hermanos León Gutiérrez obtuvo la certificación de las autoridades sanitarias mexicanas después de que demostraron la efectividad del producto contra diversos patógenos a través de estudios clínicos y en laboratorios del Instituto Politéc- nico Nacional y la Universidad Nacional Autónoma de México, además de recibir un certificado de virología del Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias.
Sergio explicó que para obtener la patente de sus productos efectuaron también diversos protocolos clínicos de eficacia, seguridad y toxicidad en los servicios de medicina genómica del Issste y en el Centro Médico Nacional Siglo XXI del IMSS.
Además, su invento se sometió a pruebas en laboratorios acreditados por la Comisión Federal para la Protección de Riesgos Sanitarios (Cofepris) que comprobaron que no son agresivos contra la salud humana ni dañan el medio ambiente. Gran parte de las investigaciones se realizaron con apoyo Sistema Nacional de Investigadores del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología. “Con dos litros de nanotecnología ya eres una empresa de nanotecnología y tan solo el año pasado hicimos 10 mil litros. Por eso somos la compañía mexicana que más nanotecología produce en el mundo”, aclaró tras referir que acaban de desarrollar un lubricante vaginal con el mismo principio.
En apariencia solo se trata de artículos comunes, pero en realidad están elaborados con nanopartículas, dióxido de titanio y extractos naturales que, combinados, atacan virus y bacterias. “Son productos preventivos que inactivan varios tipos de patógenos como el virus A/H1N1, adenovirus, bacterias, hongos, esporas, tripanosomas y micobacterias causantes de tuberculosis o neumonías, sin dañar las células sanas o degradar el ADN humano”, destacó León Gutiérrez.
El empresario explicó que un litro de su desinfectante cuesta alrededor de 4 mil pesos pero evita infecciones y, sobre todo, deja libres las camas que ocupan los pacientes contaminados por vías aéreas y estomacales en el hospital. “Una persona entra por una operación de rodilla y termina por enfermarse de neumonía, prolongando su estancia hospitalaria; incluso, se mueren. Lamentablemente, en la mayor parte de los hospitales del país siguen usando los trapitos que embarran todos los microorganismos y que resultan más agresivos, es como si estuvieras en un panteón”, aseguró.
Además, en los hospitales se siguen empleando antibacteriales cuando se está atendiendo a pacientes con virus de influenza. “También triclosán, usado por sus supuestas propiedades antibacterianas y que se incluyen como compuestos en desodorantes o pasta de dientes. La FDA lo prohibió al darse cuenta que es un agente cancerígeno y causa resistencia no solo de los microorganismos, sino también de los antibióticos que utilizan los pacientes”, aseveró Sergio.
Y a ello se suma que el personal de limpieza sigue usando limpiadores con aroma y cloro, cuando forman parte de la lista de artículos que la OMS señaló que deben dejarse de usar en los hospitales.
En la actualidad los productos desarrollados por los hermanos León Gutiérrez son empleados en el Hospital Civil de Guadalajara y en el de Marina. M