LA FRIALDAD DEL PLANTEL
Los actores más importantes de esta calamidad llamada Cruz Azul son los jugadores. Nuevamente el plantel está en el ojo del huracán con calificativos como pechos frío, indolentes, etc.; sí, ellos deben ser los ejecutores de un sistema de juego, los que deben definir las jugadas y cubrir bien la retaguardia. Pero, ¿qué sucede en un equipo que semestre a semestre ficha buenos elementos que no logran rendir como en otros clubes? Hay muchos supuestos, pero nadie se atreve a decir a ciencia cierta qué es lo que pasa, lo único cierto es que esta plantilla se ha convertido en una de las más perdedoras del futbol mexicana, lejana a la que en otras décadas encumbró a este club. Un vestidor contaminado: Lo de Cruz Azul parece algo crónico. Pueden llegar elementos de gran cartel y personalidad, pero parece que al poco tiempo se contagian de lo que impera en La Máquina, además, la cuestión anímica golpea mucho. Este conjunto es emocional, una mala racha y se derrumba. La directiva se ha esforzado por mantener una columna vertebral con elementos como Christian Giménez y Jesús Corona, pero tal vez lo mejor sería formar un nuevo grupo con líderes que no estén tan afectados por los malos resultados. Jugadores en bajo nivel: En los últimos años el nivel de varios ha caído considerablemente. Por ejemplo, Julio César Domínguez nunca se llegó a consolidar como ese zaguero que prometía en sus inicios; Francisco Silva no es el contención que ejerció de líder en Chiapas; ni qué decir de Joao Rojas, que da un juego bueno por tres malos. Hasta Jesús Corona ha cometido errores en los últimos torneos. De los refuerzos, Cauteruccio está muy lejos de ser el goleador que se anhelaba, mientras que Jorge Benítez cada torneo va de mal en peor. Piezas que no embonan: Tal parece que el plantel que se le dio a Paco Jémez no era el adecuado para su estilo. Por ejemplo, al español le gusta atacar y dejar casi en mano a mano a su defensa, pero para ello necesita zagueros rápidos, razón por la que incluso llegó a mandar a la tribuna a Enzo Roco, seleccionado chileno; en el mediocampo, Rafael Baca le ganó la partida al Gato Silva, uno de los fichajes importante del torneo pasado, pero que no es rápido, y adelante, Cruz Azul sencillamente no tiene un delantero con garantías.