Santos Laguna venció al América en el Corona; las Águilas sumaban siete partidos sin derrota en Liga
El conjunto lagunero venció al América en tiempo de compensación; las Águilas se mantienen en zona de Liguilla y buscarán su calificación en los próximos dos partidos que jugarán en casa
América roza la Liguilla, tiene en sus manos estar en ella, le falta una pizca para alcanzarla, pero deberá hacer más, mucho más para ser un aspirante al título, pensar que con el orden defensivo es suficiente para ganar los partidos es una apuesta muy arriesgada, ayer estuvo a punto de lograr un empate, un punto que no merecía porque a lo largo del partido fue mejor Santos. Parecía que los laguneros se venían abajo con el empate americanista, pero su fe inquebrantable les llevó a encontrar la victoria en la última jugada, un 2-1 a favor que los proyecta al quinto lugar de la tabla general.
Las Águilas no son un equipo propositivo, distan mucho de serlo, más bien son un conjunto especulativo, de esos que esperan el error del rival y no asumen el protagonismo del partido. América perdió en Torreón porque mereció perder. Fue una derrota cruda, de último minuto, cala más cuando eso pasa, pero Santos hizo todo lo posible para llevarse los puntos, aprovechó un error en la defensa, un despiste en una zaga que incluso ayer estuvo a punto de lograr otro cero, pero pudo más el ímpetu de los laguneros.
El escenario para América estaba bien claro, la calificación pasaba por puntuar ante Santos, para ello La Volpe mantuvo el mismo traje de la semana pasada, pero de inmediato empezó a vivir momentos de apuro, algo a lo que se ha acostumbrado el equipo deCoapa en las últimas fechas.
El arranque de los laguneros fue mejor, con más intensidad y un poco de más lucidez; sin embargo, en la última zona no lograba buenos resultados el conjunto del Chepo de la Torre. Jonathan Rodríguez y Djaniny fueron de lo más punzante, jugadores que obligaban a los defensores americanistas a tener los nervios a tope.
Y ofensivamente América tuvo un desempeño pobre, muy bajo, igual que en las últimas semanas, con apenas alguna que otra combinación aislada, pero sin ninguna sensación de peligro real, con la vista fija en guardar el cero. Empezó entonces el show de Agustín Marchesín, el portero y la zaga han mantenido con vida al equipo y ayer el arquero argentino volvió a ser determinante bajo palos.
Santos era el que trataba de hacer un juego más fluido, pero se topaba de frente con la defensa americanista, una línea bien sólida comandada por el propio Marchesín y Bruno Valdez. El portero atajó al 38’ un remate de Furch, tras un buen servicio que le puso Djaniny.
Respondió América con un tiro de Paul Aguilar que exigió a Jonathan Orozco. Siguió Santos a lo suyo, Sandoval encabezó un contragolpe, filtró para Rodríguez y el uruguayo, con un punterazo, trató de superar a Marchesín, pero el guardameta hizo una buena atajada. Después su defensa tapó otro tiro de Jorge Sánchez, cuando éste había recortado a un par de jugadores.
Sobrevivió América al primer tiempo, para el segundo La Volpe ajustó, el Chepe Guerrero tomó el lugar de Lainez, pero Santos no cambió su guion, volvió a acosar la puerta americanista, lo malo es que la puntería de los laguneros estuvo muy errática.
Volvió a pasar el vendaval, América logró asentarse, se multiplicaba con un Oribe muy activo en medio campo e incluso en defensa, pero en ataque no mostraba gran cosa, pero al menos no eran agobiados. Ingresó Darwin y tomó un poco más la pelota el cuadro de La Volpe.
Avanzó el tiempo, América resistía parecía que se llevaba un punto, pero Santos rompió la imbatibilidad americanista. En el minuto 82, Furch —en el área— cedió para Jorge Sánchez, quien mandó un centro raso que controló Jonathan Rodríguez, el charrúa, con una media vuelta rapidísima logró rematar a contrapié de Marchesín, quien no pudo impedir la anotación.
América a remolque a buscar su suerte, y la tuvo, en un córner lanzado por Arroyo apareció Oribe, el Cepillo es espíritu puro, un cabezazo franco en el área igualó el partido. Las Águilas rescataban un partido que no merecían. Santos no cayó en shock, creyó que podía y aprovechó un despiste de las Águilas.
En un saque de banda, la zaga azulcrema dejó votar la pelota en el área. Ulises Rivas la retrocedió para Diego de Buen, quien sacó un tiro fulminante, que doblegó a Marchesín. Santos se llevaba tres puntos de oro, ascendía en la tabla y se pone a un paso de la Liguilla.
América tiene en sus manos alcanzar una buena posición, pero deberá dar un salto de calidad considerable en su juego. Pensar que con solo defender te puede alcanzar para llegar al título es una apuesta que las Águilas no deben correr.
Se pierde la pelota en la mitad de la cancha, tuvimos un error que nos costó” Toda derrota duele, pero deja una enseñanza. Nos falta encontrarnos arriba” Entrenador de América