El verdadero poder
No quepo en mí de la emoción de estar viendo la miniserie Los Médici (Médici: Masters of Florence) tanto en el canal Fox Series como en el acceso Premium de la app de Fox.
Es una superproducción de época que, como su nombre lo indica, narra las aventuras de una familia que cambió la historia de la humanidad durante la época de oro del Renacimiento italiano.
Sí, yo sé que el gran gancho publicitario es la maravillosa presencia de Dustin Hoffman en uno de los papeles más importantes de esta joya de tan solo ocho capítulos de una hora.
Pero, la verdad, aquí hay material para que usted y yo enloquezcamos de placer de aquí a fin de año.
Mire, esta no es la típica serie de edición limitada de Estados Unidos de toda la vida, es un proyecto que nació de la mismísima televisión europea pero con la colaboración de muchos organismos internacionales.
Resultado: usted va a ver una pulcritud muy poco acostumbrada de este lado del océano Atlántico pero, al mismo tiempo, va a levitar con uno de los mejores espectáculos del año.
A mí me impresiona la capacidad de los responsables de esta miniserie para convertir algo tan aparentemente viejo en un asunto ciento por ciento actual, compatible con la realidad del siglo XXI.
Esta es una historia de dinero, de grandes corporaciones y de poder.
Solo que ese dinero controla hasta a la Iglesia católica. Solo que esas grandes corporaciones manejan hasta las más influyentes casas reales.
Solo que ese poder está por en- cima de todo: de las emociones, de la justicia, de la paz, de los gobiernos y hasta de Dios.
¿Se da cuenta de lo que le estoy diciendo? Es una bomba pero, además, es una apasionante historia de asesinatos, intrigas, erotismo y amor.
No hay manera de que usted se siente a ver uno mínimo fragmento de esta superproducción y de que no se identifique, de que no sienta que las cosas han cambiado muy pocos desde entonces y de que no caiga cautivado ante la profunda inteligencia y sensibilidad de estos textos, de estas imágenes.
Por favor, busque la transmisión regular de todos los capítulos de esta preciosidad de miniserie en el canal Fox Series (se estrenan los viernes a las 20:00 horas, pero hay repeticiones).
O, si estan insaciable como yo, luche por consumirlos todos en la app de Fox.
Porque sí, ya están todos los episodios de Médici: Masters of Florence en esa plataforma y ver la tele en maratón es lo de hoy. ¿A poco no? Ahora sí me quedé como estúpido. ¿Con qué? Con Masters of Photography, el primer gran reality show de fotografía del mundo.
Se lo voy a decir tal cual: a estas alturas del partido, cuando hemos visto ejercicios de televisión real de modelos, cocineros, futbolistas, boxeadores, peluqueros, caracterizadores y hasta de diseñadores de moda, ¿qué programa podría aparecer en el mercado lo suficientemente bueno como para sorprendernos?
¡Pues éste! Si me lo hubieran contado, no lo hubiera creído.
¿Por qué? Porque, aparentemente, la fotografía es una actividad estática, técnica, solitaria, pero no, también es apasionante, emocionante y como todos tomamos fotos, de una manera u otra todos nos sentimos representados ahí.
Por si esto no fuera lo suficientemente atractivo, Masters of Photography goza de una producción internacional alucinante donde los participantes brincan