Habrá castigo por narcorreventón en penal, caiga quien caiga: gobernador

Habrá castigo por el narcorreventón en el penal estatal de Puente Grande “caiga quien caiga”, ofreció el gobernador de Jalisco, Aristóteles Sandoval. En entrevista con reporteros, el mandatario estatal puntualizó: “Instruí al fiscal para que en lo antes posible señale y castigue a los responsables, caiga quien caiga”.

El pasado 8 de mayo, MILENIO informó sobre una fiesta que organizó en esa cárcel José Luis Gutiérrez Valencia, Don Chelo, líder del cártel de Jalisco Nueva Generación, que estuvo amenizada por grupos como Los Buchones de Culiacán y en la que se repartió whisky.

Un día después, Eduardo Almaguer, fiscal del estado, informó que dicha fiesta ocurrió en junio de 2013, fue autorizada por el jefe de custodios Enrique Huerta Balcázar, quien fue cesado en noviembre de ese año por diversas irregularidades.

En ese entonces el director del reclusorio era Pedro Serratos y Marisela Gómez Cobos (actual titular de la Fiscalía Central), la fiscal de Reinserción Social.

Al respecto, ayer Aristóteles Sandoval afirmó que continúan las investigaciones para determinar si hubo funcionarios responsables que hayan permitido y otorgado las facilidades para la celebración.

“Efectivamente (la fiesta) fue a tres meses de cuando nosotros llegamos. Cuando llegamos la descomposición y la infiltración del crimen organizado en nuestras corporaciones, en la Procuraduría, en el área de reinserción social pues... eran funcionarios que habían sido nombrados en la anterior administración”, explicó.

Aseguró que el gobierno estatal actualmente cuenta con el control de las penitenciarías en la entidad y no se permitirá que vuelvan a ocurrir actos como esos.

“El trabajo se está haciendo, lo hicimos desde el primer día de gobierno y no vamos a admitir que bajo ninguna circunstancia el estado pierda el control”, insistió.

Respecto a la sobrepoblación en las cárceles estatales, el gobernador manifestó que con los recursos necesarios para concluir el Reclusorio Metropolitano.

Reconoció que existe una carga de trabajo en el Poder Judicial lo que imposibilita a la cantidad de personal encargado de dar continuidad a las sentencias de personas en cárcel. En Jalisco se reporta que 52 por ciento de reos no han sido sentenciados. m