Harry Styles dedica su show a las víctimas de Mánchester
El británico salió al escenario del Lunario del Auditorio para pedir un minuto de silencio por las muertes que arrojó el atentado en su país
La nostalgia y el luto protagonizaron el concierto de Harry Styles en la Ciudad de México, pues el ex integrante de One Direction dedicó su presentación en el Lunario del Auditorio Nacional a las víctimas del atentado en la Arena Mánchester.
El saldo del ataque del pasado lunes, que las autoridades aseguran fue un ataque suicida, dejó 23 muertos y 55 heridos, así que para Styles no era un buen día para celebrar, declararon las fans que lograron obtener una entrada para la presentación. “Salió al escenario 20 minutos antes de que empezara el concierto, nos dijo que lo disculpáramos, pero que hoy era un día de luto, no de fiesta”, dijo Lua Vega, seguidora del británico.
El cantante, quien iba a presentar su primera producción discográfica como solista, solo cantó cinco temas, “Two Ghosts”, “Ever since New York”, “Sweet Creature”, “Dinning Table” y cerró con “Sign of Times”. “Nos pidió que guardáramos un minuto de silencio por todas las víctimas del atentado. Después nos informó que solo cantaría pocas canciones por respeto a ellos”, dijeron las fans después del concierto.
Las seguidoras del cantante aseguraron que Styles se veía triste y poco animado, pero que ellas entendieron y cantaron con él a todo pulmón para honrar a las familias de los heridos y de aquellos que perdieron la vida. “Al principio cuando salió no dejábamos de gritar y se frustraba, porque no lo dejábamos hablar. Pero después entendimos su mensaje y para lo único que alzábamos la voz era para cantar con él”, aseguraron sus fans.
Desde las 6 de la mañana, las afueras del recinto de Reforma se encontraban invadidas por fans del intérprete; unos hicieron fila muy temprano para ocupar los mejores lugares y otros estaban al pendiente de las dinámicas que una estación de radio estaba organizado para regalar los últimos boletos. “Me desperté desde las 4 de la mañana para llegar aquí a las 6:30, me formé más de cinco horas luchando contra el calor. Pero valió la pena, porque, aunque solo fueron unos minutos, pude escuchar la voz de Harry en vivo”,
Sin embargo, muchos otros fans de hueso colorado no fueron tan afortunados, pues cientos de ellos derramaban lágrimas en la entrada de el Lunario, porque no pudieron conseguir o comprar su entrada.
El concierto arrancó, pero los seguidores del cantante de 23 años no se rendían y seguían gritando “¡Harry! ¡Harry!” en espera de que saliera a saludarlas. “Las que de verdad somos sus fans, no lo seguimos, porque es guapo o por moda, sino por su talento y ahora también por sus letras”, gritaban decenas de niñas que aseguraban ser Directioners.