EL TORNEO DEL PRESIDENTE
Uno de los campos propiedad de Donald Trump será sede del campeonato Senior de la PGA, y se esperan varias protestas
La sede de este año del campeonato Senior de la PGA ha sido motivo de comentarios que no tienen relación con el torneo, o el posible monarca. Los mejores golfistas mayores de 50 años competirán por primera vez en un campo que es propiedad del actual presidente de Estados Unidos: el Trump National Golf Club, en el río Potomac, a 40 kilómetros de Washington, DC.
El mandatario ha visitado el green cuatro veces desde que asumió el cargo.
El lugar ha sido objetivo de protestas y motivo de burla, porque incluye una placa que conmemora una batalla de la Guerra Civil que nunca ocurrió; la policía espera reclamos en el río, que es la única forma de entrar a la propiedad sin boleto.
“Es positivo, mientras sea con tranquilidad”, señaló el golfista Paul Goydos, después de su ronda de práctica. “Tienen el derecho de gritar desde el río o de hacer ruido, es sano para nuestra sociedad, necesitamos que se exprese”.
Cuando fue anunciado como sede en 2014, nadie imaginaba que Trump, quien quería organizar un certamen importante para convertir sus campos de golf en una marca a nivel mundial, sería electo presidente de Estados Unidos dos años más tarde.
El torneo se realiza en ese lugar como parte del acuerdo con Donald, que también será anfitrión del Campeonato de la PGA en 2022, aunque en el campo Trump National en Bedminster, Nueva Jersey.
Trump era conocido por sus llegadas en helicóptero al torneo de Doral en Miami, después de comprar y renovar el campo, pero el Tour de la PGA cambió la sede del certamen a México, cuando el patrocinador principal no renovó el acuerdo.
El presidente de Estados Unidos no está en el país y el único día que podría ir al torneo sería el domingo, pero Goydos dijo que no aparecerá. “Espero que tenga mejores cosas que hacer”.
Trump tiene mucho apoyo entre los golfistas, varios jugadores, incluido el campeón defensor, Rocco Mediate, y Fred Funk, utilizaron el logo del empresario en sus playeras.
“Es el presidente de Estados Unidos, la gente debería subirse al tren y dejarlo que haga su trabajo”, afirmó John Daly. “Creo que está haciendo un gran trabajo”.
El torneo de este fin de semana se celebra cada año en Harbor Shores, en Benton Harbor, Michigan, pero en distintas temporadas, se rota la sede.
La historia del Trump National es compleja, el empresario compró el Club Lowes Island en 2009 y gastó 25 millones de dólares en renovarlo, cortó más de 450 árboles en el río Potomac para colocar hoyos, una decisión que provocó las protestas de varios grupos ambientalistas.
El campo ha sido objeto de vándalos en dos ocasiones en los últimos meses, una el día de la elección y otra en abril; no hubo detenidos, aunque en el incidente más reciente escribieron “resistencia” en el camino, levantaron el pasto y vertieron algunos químicos.
El inmueble tiene una placa que señala que ambos bandos sufrieron bajas en la Guerra Civil en esa parte del Potomac, por lo que es llamado Río de sangre, aunque no hubo batallas cerca, de acuerdo con historiadores.