“El poder de los militares”
Proponer la posibilidad de que sea Salvador Cienfuegos o bien Vidal Soberón candidatos a la Presidencia, o bien que, ante tanta ausencia y crisis de autoridad, instauren un régimen militar, es tan improbable como ignorante.
Sin duda, como secretarios de Estado han tenido las mejores calificaciones del gabinete. Sus secretarías son las que mejor y más fehacientes resultados le han entregado al Presidente, realidad que es reconocida por todos, dentro y fuera del país. Pero de ahí a que tengan aspiraciones políticas hay un abismo de distancia, ya que tanto el general como el almirante saben bien el riesgo que enfrentaría el país al partidizar a las fuerzas armadas o bien comenzar una actividad política como militares.
Que pierdan cuidado las buenas conciencias de este país.
No hay ninguna intención por parte de Cienfuegos o Soberón por cambiar su honrosa carrera de las armas por adentrarse en el “mierdero” que será la elección del año entrante.
Hay poderes que no se cambian.
Cabo de Guardia
Hemos afirmado en este espacio que las relaciones militares entre México y Estados Unidos, y muchos países más, son las mejores de la historia.
Solo esta semana se llevó a cabo la reunión trilateral de ministros de Defensa de América del Norte (Canadá, Estados Unidos, México) en Washington, en la que participaron los titulares de Sedena y Semar.
También la Junta de Comandantes Fronterizos México-EUA 2017, realizada en Tijuana. Esta junta tiene como objetivo fortalecer las relaciones entre las fuerzas armadas de ambas naciones, así como fomentar el intercambio de conocimientos e información sobre las actividades que realizan los ejércitos en beneficio de sus respectivos países y que permiten implementar los mecanismos para mejorar la cooperación bilateral en la frontera común.
Asimismo, la Plataforma Global para la Reducción del Riesgo de Desastres, el principal escenario para el diálogo de las partes interesadas en el tema y el desarrollo de la resiliencia de las comunidades y las naciones. Por primera vez se realizó fuera de Suiza y el anfitrión fue México, en colaboración con la Oficina de las Naciones Unidas para la Reducción del Riesgo de Desastres.
Sedena participó con el despliegue de la Fuerza de Apoyo en Casos de Desastres. La sede fue Cancún.
Ya les hablaré después de la Conferencia de Ministros de Defensa de las Américas que preside México.