PIB e inflación al alza, prevé encuesta Banxico
La estimación para 2017 es que el aumento de precios llegue a 5.9% y el crecimiento del país a 1.97%; la inquietud sigue siendo la seguridad pública
Los especialistas en economía del sector privado mostraron un mayor optimismo respecto al crecimiento que tendrá el país y al desempeño del tipo de cambio, pero también prevén que la inflación alcance tasas más altas al final del año, reveló la encuesta de expectativas que realiza el Banco de México (Banxico).
De acuerdo con el sondeo correspondiente a mayo, los expertos estiman que en diciembre de 2017 la inflación cerrará con una tasa anual de 5.9 por ciento, cuando un mes antes previeron 5.67 por ciento; para 2018 el pronóstico se elevó de 3.83 a 3.88 por ciento.
No obstante, en materia de crecimiento económico los especialistas se mostraron más optimistas, pues consideran que en 2017 el producto interno bruto (PIB) aumentará 1.97 por ciento, por arriba del cálculo considerado en abril, de 1.66 por ciento; para 2018 las previsiones se elevaron de 2.12 a 2.18 por ciento.
En materia de tipo de cambio, los analistas también reflejaron mejores condiciones, al revisar a la baja sus previsiones, para el cierre de 2017 estiman un nivel de 19.53 pesos por dólar, cuando un mes antes lo ubicaban en 19.75, y para 2018 la revisión se redujo de 19.67 a19.39 pesos.
Los especialistas consideran que los principales elementos que pueden obstaculizar el crecimiento económico en los próximos seis meses son problemas de inseguridad pública, la plataforma de producción petrolera, incertidumbre política interna, presiones inflacionarias y la inestabilidad política internacional.
El área de análisis de Scotiabank indicó que los expertos mejoran su optimismo hacia el segundo semestre del año en torno a la perspectiva de crecimiento económico de corto plazo y a la evolución del tipo de cambio, adelantándose al banco central que ajustó ligeramente al alza el intervalo de crecimiento esperado para este año, entre 1.5 y 2.5 por ciento, pero resaltó que los factores que más preocupan son, nuevamente, de naturaleza interna, con un incremento en la inquietud por los problemas de seguridad pública. Aunque la mayoría del los integrantes de la Junta de Gobierno del Banco del México (Banxico) señaló que durante los primeros tres meses del año la economía mexicana siguió expandiéndose a un ritmo similar a lo observado en el último trimestre de 2016, algunos de ellos coincidieron que las expectativas de mediano plazo son “marcadamente inciertas” y que el balance de riesgos para el crecimiento continúa sesgado a la baja.
De acuerdo con la minuta de la última reunión de política monetaria, donde la Junta de Gobierno decidió por unanimidad elevar la tasa de interés de referencia de 6.5 a 6.75 por ciento, un integrante señaló que en el primer trimestre del año el desempeño de la economía fue mejor que lo anticipado y la mayoría destacó que persistió la mejoría en la demanda externa, al tiempo que el consumo privado mantuvo una trayectoria positiva.
Algunos integrantes de la junta coincidieron en que, para este año, se prevé que el crecimiento de la economía mexicana sea inferior al observado en promedio durante 2016, y uno de ellos indicó que la incertidumbre por el crecimiento en el mediano plazo podría afectar tanto al consumo como a la inversión.
Algunos explicaron que sigue
sin haber claridad sobre las políticas que se pondrán en marcha en Estados Unidos (EU), lo que hace que persista un entorno de incertidumbre por encima de lo usual, y uno aseveró que dicha incertidumbre es el principal factor de riesgo para la economía nacional.
La mayoría espera que durante 2017 la inflación se ubique considerablemente por encima de la cota superior del intervalo de variación del Banxico (3 por ciento, más-menos 1 por ciento), pero anticipa que en los últimos meses de 2017 y durante 2018 retome una trayectoria convergente al objetivo de 3 por ciento y que alcance dicho nivel al final del horizonte de pronóstico.
Remesas aumentan 6.2%
En abril el monto de las remesas sumó 2 mil 306 millones de dólares, superior 6.2 por ciento respecto al mismo periodo de 2016, para sumar dos meses consecutivos de crecimiento, de acuerdo con el informe mensual del Banxico.
En su comparación mensual descendió 8.5 por ciento respecto al tercer mes del año; en contraste con el crecimiento mensual de 22.91 por ciento de marzo respecto a febrero del mismo año.
La contracción se debió principalmente a las transferencias electrónicas, las cuales registraron una caída mensual de 8.71 por ciento y un aumento anual de 6.22 —en contraste con el avance anual en marzo de 15.40 por ciento—, con un nivel de 2 mil 259 millones de dólares, monto histórico en el mismo mes de años pasados.
En cuanto a los otros componentes, las money orders —transferencias de dinero sin necesidad de una cuenta bancaria—, con un valor de 9.7 millones de dólares, presentaron un descenso anual y mensual de 24.53 y 8.7 por ciento, respectivamente; mientras que las operaciones en efectivo y en especie presentaron un aumento anual de 20.93 por ciento y mensual de 7.9 por ciento.