Una batalla más corta
Con el grito de “¡Delpo, Delpo!’” el público de la cancha Philippe Chatrier despidió al argentino Juan Martín del Potro, después que cayera en un duelo de casi tres horas ante el número uno del mundo, el británico Andy Murray, en la tercera ronda de Roland Garros.
El argentino, favorito 29, desaprovechó varias oportunidades para ganar el primero y el segundo set y cayó 7-6 (10/8), 7-5 y 6-0.
“Todo el mundo valora mi historia, estuve fuera mucho tiempo, pienso que por eso me apoyan tanto”, dijo el sudamericano, que este año volvió a Roland Garros tras cinco años de ausencia.
“Me encantó lo que pasó en la cancha, estoy muy contento por ver a la gente apoyándome, eché de menos este torneo, espero el año que viene estar mejor y pasar más días aquí”, señaló.
El tandilense sufrió un tirón muscular en el aductor, en la ronda anterior, y no acompañó sus poderosos argumentos tenísticos con la condición física necesaria para batir a un atleta como Murray.
Rotundo con el drive, Delpo logró pronto un rompimiento sobre el escocés, que se lo devolvió después que el argentino tuviera bola para el set.
Pero el argentino multiplicaba los gestos negativos, se tocaba el aductor, movía la cabeza, gritaba o amagaba con golpear el suelo con la raqueta, y un posible abandono planeaba en la central.
El largo primer capítulo, de casi una hora y media, se definió en el tie-break para Murray, el sudamericano se lamentó de las ocasiones perdidas apoyando la cabeza en la red unos instantes.
“Es normal, estaba frustrado, tuvo varias oportunidades para cerrar el set, incluso una doble falta en el desempate en uno de sus puntos para el capítulo”, dijo el escocés sobre la reacción del argentino. “Jugó mucho mejor que yo en ese primero”.
A continuación, el primer sembrado aprovechó el bajón emocional de su adversario para lograr un rompimiento al inicio de la segunda manga.
Del Potro se fue recuperando, pero una vez más Andy estuvo mejor en el desenlace.
“Sentía demasiada frustración, tuve muchas oportunidades para ganar en los dos primeros sets, pero cuando juegas ante un gran campeón como Murray tienes que aprovechar las pocas oportunidades que te da”, aseguró el campeón del US Open 2009.
La tercera manga tuvo menos historia, Murray siguió su línea de regularidad y a Del Potro no le alcanzó el físico para poder competir, cedió el triunfo en dos horas y 53 minutos.
“Con semejante apoyo y cariño, aunque había perdido mil oportunidades, quería seguir disfrutando en la cancha, sabía que en lo tenístico había perdido, pero quería seguir con el público”, concluyó Delpo.