Netflix Orphan Black
Que nadie se mueva, Netflix está pasando ya Final Trip, la quinta y última temporada de Orphan
Black, una joya de la televisión internacional.
Vamos a suponer que usted no la conoce, que jamás la ha visto. ¿Qué es Orphan Black? ¿Como por qué tendría que verla? ¿Qué tiene de joya?
Orphan Black es una serie de ciencia ficción de BBC America que atrapa al espectador desde la escena uno del capítulo uno de la temporada uno y que lo va involucrando en un torbellino irrefrenable de emociones e ideas.
Es un espectáculo prodigioso que habla de la clonación humana como jamás se había hecho ni en cine ni en televisión con una producción francamente alucinante.
Imagínese usted que, a la complejidad de jugar con contenidos de vanguardia y con efectos especiales de última generación hay que sumarle situaciones como que la gran actriz protagónica de esta serie no interpreta a un personaje.
No. Tampoco interpreta a dos o a tres. ¡Interpreta a decenas! Sí, a decenas de mujeres y hasta de hombres con diferentes aspectos, psicologías, orientaciones sexuales y acentos todos ciento por ciento creíbles.
Por la más elemental curiosidad, usted debe ver completo el arranque de este concepto. Punto.
Y sí, es una joya porque rompe esquemas científicos, religiosos y emocionales, porque más allá de la diversión nos invita a reflexionar, porque su manufactura es exquisita.
Por si todo lo que le acabo de decir no fuera suficiente, es un éxito de audiencias. ¡A la gente le fascina! ¡Tiene miles de fanáticos en todo el mundo!
Si usted jamás la ha visto, entréguese a ella, completita, desde el principio a través de Netflix y, por supuesto, enloquezca de placer con lo es ya su despedida oficial.
Solo que sí tengo que hacerle un advertencia: Netflix no tiene toda la quinta temporada completa. La está subiendo a un ritmo de un capítulo por semana.
¿Por qué? Porque nos la está ofreciendo unas cuantas horas después de su transmisión de estreno en Estados Unidos.
Allá pasa los sábados. Acá la tenemos los domingos en su idioma original, con subtítulos, sin subtítulos y hasta doblada al español mexicano.
¿Cuáles son las notas? Primero, que Netflix se ha convertido no solo en una marca líder dentro del mercado de los sistemas de distribución de contenidos en línea.
Es ya la enemiga número uno de los cables y de las antenas directas al hogar.
Hasta hace muy poco tiempo, cuando algo se estrenaba en Estados Unidos, nos llegaba a ese ritmo a través de frecuencias como HBO, Sony, Fox o Warner.
Ahora nos llega por Netflix y se queda en Netflix. ¡Gran bronca para HBO, Sony, Fox, Warner y los demás! ¡Se están quedando cada vez con menos materiales!
Segundo, que BBC, nuestra queridísima BBC, sigue viva y continúa generando muchas de las mejores series del mundo.
A lo mejor usted ya no las está mirando a través del ahora extinto canal BBC Entertainment, pero las está gozando en plataformas como Netflix.
¡Tardaron pero se encontraron! BBC + Netflix. ¡Magnífica combinación!
Y tercero, esta temporada de esta serie va a dar mucho de qué hablar por ser la última. No me quiero ni imaginar la reacción de la gente en los Emmys y en los Golden Globes.
Ahí va a pasar algo y usted puede ser parte de eso, como los mejores televidentes del mundo, si se aboca desde ahora al lanzamiento de cada uno de los capítulos de esta gran propuesta.
¿Qué tiene de especial la quinta temporada de Orphan Black respecto a todo lo que habíamos visto antes?
Que como ya es el cierre, pasa lo inimaginable. No sé usted pero yo devoré el capítulo en cuanto salió y no podía parar de gritar.
El seguimiento y crecimiento de los personajes es perfecto, está la participación de nuevos actores y quienes amamos la fantasía y la ciencia ficción nos podemos retorcer de lujuria ante todo lo que dice ahí, en esa isla misteriosa, como del Doctor Moreau, a donde se ha desplazado la acción.
El único problema con este nuevo paquete de episodios, por la magnitud de la inyección de adrenalina, es que sí es fundamental que usted haya visto completos y en orden todos los capítulos anteriores.
Pero no hay bronca, están ahí. Ésa es la ventaja de Netflix. Si usted no tiene los antecedentes y la televisión no se los da, pone los episodios que más le hayan gustado, los que usted sienta que le van a servir para que se le refresque la memoria y asunto arreglado. Todos felices.
Si usted estaba buscando una magnífica serie de televisión con calidad mundial para entretenerse sin padecer ese asunto de quién sabe cuándo vaya a acabar, ya la encontró.
Esto termina en unas cuantas semanas más y no termina porque le esté yendo mal, termina porque sus responsables quieren cerrar en alto.
Por lo que más quiera, luche por ver lo nuevo y lo viejo de
Orphan Black en Netflix. Es una de las mejores producciones televisivas del mundo. ¿A poco no?