Oposición venezolana, por “revolución democrática”
Luisa Ortega, fiscal general, se declara “preparada para todo” tras ofensiva oficial
La oposición llamó a los venezolanos a desconocer al presidente Nicolás Maduro y su convocatoria a una Asamblea Constituyente, agravando aún más la crisis que vive el país con violentas protestas que dejan 74 muertes en dos meses y medio. “El actual régimen se ha puesto al margen de la Constitución y en consecuencia su autoridad y decisiones son inconstitucionales y no pueden ser reconocidas ni obedecidas por nadie”, anunció el presidente del parlamento de mayoría opositora, Julio Borges, en rueda de prensa.
En representación de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD, centro-dercha), Borges invocó artículos de la Constitución en los que se apoyará esa coalición opositora para la “fase decisiva” hacia un cambio de gobierno, que incluirá una “gran protesta nacional permanente”. “Es el paso más radical que se ha dado en la política venezolana en los últimos años. Ya la lucha será en un plano en el que habrá una confrontación más fuerte”, anticipó el politólogo Luis Salamanca.
La oposición anunciará en los próximos días cómo concretará su llamado a la rebelión. Algunos de sus líderes han planteado una huelga general.
La oposición considera que el sistema con que serán elegidos el 30 de julio los integrantes de la Asamblea Constituyente para cambiar la Carta Magna es “fraudulento” y que su meta es instaurar un modelo comunista para perpetuar al madurismo en el poder, con apoyo de la máxima corte de justicia, los militares y las autoridades electorales.
La confrontación también se acentuó el martes con la decisión del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) de admitir el pedido e antejuicio que hizo el oficialismo contra la fiscal general, Luisa Ortega, confesa chavista que rechaza tajantemente la Constituyente.
Ortega se dijo “preparada para todo” al ser cuestionada sobre un posible juicio en una entrevista radial; denunció que la justicia es usada para “perseguir a la disidencia política” y que el TSJ desmanteló el estado de derecho”. m