Marca de jonrones
En junio se batearon mil 101 cuadrangulares en Grandes Ligas, para superar un récord que tenía 17 años vigente
El batazo de Justin Smoak se fue por la barda del jardín izquierdo en Toronto, y así se rompió un récord en Grandes Ligas. Los toleteros rompieron la marca de más cuadrangulares en un mes, superando incluso la establecida durante la era de los esteroides.
Los bateadores pegaron 1,101 jonrones en junio, para superar los 1,069 en mayo de 2000.
“Es por el calentamiento global, entre más calor hace, la bola vuelta más”, bromeó el mánager de los Cachorros de Chicago, Joe Maddon.
Lo que está claro es que los bateadores tuvieron ayuda extra al final del siglo XX, y los números a la ofensiva bajaron después de los exámenes de doping que comenzaron en 2004, y la prohibición de las anfetaminas en 2006.
Pero los toleteros se han recuperado desde la segunda mitad de la temporada de 2015, y cuatro de los seis meses con más jonrones se han dado en ese tiempo: junio se sumó a mayo de este año (1,060), y a agosto de 2016 (1,053) y junio (1,012).
“No puedo ofrecer una explicación concreta por el incremento en los cuadrangulares”, señaló el comisionado de Grandes Ligas, Rob Manfred. “Hemos hecho exámenes y estamos convencidos que esa no es la razón, es atribuible a los cambios en el juego y a la preparación de los bateadores que ha sido bien documentada”. El promedio en junio fue de 2.70 jonrones por partido, para imponer también una nueva marca, al superar los 2.64 de mayo de 2000.
“Esta temporada es extraña”, afirmó el mánager de Cincinnati, Bryan Price. “Todos lanzan a más de 100 millas por hora, pero todos pegan 24 cuadrangulares en 60 partidos”.
La ofensiva en el beisbol se ha vuelto todo o nada. También se han roto récords de ponches en los últimos nueve años, y la campaña anterior hubo un promedio de 8.02 por equipo en cada partido, un 27 por ciento más que el 6.30 de 2007.
El promedio este año es de 8.23, camino a romper otra marca.
“El juego se ha convertido en dar un mayor esfuerzo en cada enfrentamiento”, dijo Mark Trumbo, de los Orioles de Baltimore, quien encabezó las Mayores con 47 jonrones en 2016. “Los cuadrangulares están de moda y todos lo intentamos”.
Jake Odorizzi, pitcher de Tampa Bay, tiene otra explicación: “a veces recupero las bolas, y tienen una abolladura, creo que las cambiaron y no lo hicieron público, pero es una especulación”, aunque las Grandes Ligas estudian las bolas periódicamente.
Aaron Judge, que encabeza las Grandes Ligas con 27 jonrones está a dos de la marca para un novato de los Yanquis de Nueva York, de Joe DiMaggio en 1936, y afirma que la revisión del video y el análisis de los lanzamientos han dado el balance a los bateadores en los últimos años.
“En lugar de poner la bola en juego, quieren que hagamos daño, que la enviemos con fuerza”, aseguró Judge. “Cada año llegan peloteros más grandes, más fuertes y más rápidos”, agregó el mánager de los Rockies de Colorado, Bud Black.