Perros que mataron a niña en Coyoacán vivían enjaulados

Les daban de comer y limpiaban su lugar sin sacarlos; pocas veces eran llevados a la calle

Vecinos de la casa donde dos perros de la raza pitbull mataron a una niña de tres años, aseguran que los animales eran agresivos y casi nunca los sacaban de sus jaulas.

Feliciano Ibarra, habitante de la zona, cuenta que comían y eran aseados en la misma jaula, que solo una persona tenía control sobre ellos y era quien algunas veces los sacaba a caminar por la colonia. “El encierro los hizo agresivos”, señala. “Había un señor que les daba de comer por arriba de la malla y les aventaba el alimento. Para acercarles el agua lo hacía por la parte de abajo, les jalaba con un gancho el bebedero y lo enjuagaba; sacaba el excremento y lavaba el lugar con una manguera a presión; mantenían limpio, pero no abrían las jaulas”.

Ibarra tiene poco viviendo en la zona y recuerda haber visto a cuatro perros desde su azotea, pero después los cambiaron de lugar.

Dijo que aunque los animales parecían peligrosos, nunca se imaginó la tragedia que ocurrió: la muerte de una pequeña de tres años atacada por los canes.

Recuerda que los gritos lo alertaron del ataque de los canes. “Era casi mediodía cuando se empezó a escuchar en la parte de atrás de la casa que gritaban ‘suéltalo, suéltalo’, pero pensábamos que era una pelea entre familiares; nunca imaginamos la magnitud de lo que ocurría”, agregó.

Los animales están en resguardo en el Centro de Control Canino de Coyoacán, donde se reportan en buen estado de salud.

El pasado miércoles una niña de tres años murió tras ser atacada por dos perros pitbull en la colonia San Pablo Tepetlapa.

Las autoridades indicaron que empleados domésticos de la vivienda liberaron por accidente a uno de los perros para que comiera en el jardín, sin percatarse que ahí estaba la menor.

Tras el incidente, la procuraduría capitalina abrió una carpeta de investigación por homicido y detuvo al dueño del can; además, la brigada de vigilancia animal de la policía contuvo y trasladó a los cuatro perros al Centro de control canino de Coyoacán. M