Continuidad a empresas tras el brexit, Trump presume plan de pacto comercial con GB
En una ráfaga de tuits, el republicano afirma que “la Unión Europea es muy proteccionista con Estados Unidos”
Donald Trump pregonó sus planes para un “importante acuerdo comercial” con Reino Unido después del brexit, mientras que reavivó su guerra de retórica comercial con Bruselas al criticar a la Unión Europea por ser “muy proteccionista”.
La intervención del presidente estadunidense se produjo como parte de una ráfaga de tuits la mañana de ayer y reforzó la visión fundamentalmente diferente de la relación comercial con Reino Unido y la Unión Europea que tenía su predecesor, Barack Obama.
Obama advirtió que Gran Bretaña estaría al final de la fila para cualquier negociación comercial con Estados Unidos si salía de la Unión Europea, mientras que Trump de manera habitual proclamó que un tratado entre EU y Reino Unido es una prioridad. “Trabajar en un importante acuerdo comercial con Reino Unido puede ser grande y emocionante. ¡Empleos! La Unión Europea es muy proteccionista con EU. ¡Alto!”, tuiteó el presidente estadunidense.
El respaldo de Trump a Gran Bretaña se produjo cuando Liam Fox, el ministro de Comercio de Reino Unido, se dirigió a los miembros del Congreso de EU durante el segundo día de una visita a Washington diseñada para iniciar las discusiones preliminares sobre un acuerdo comercial, aun cuando la nueva administración congeló las negociaciones entre la Unión Europea y Estados Unidos que iniciaron con Obama. Pero también se adelantó a los cuidadosos esfuerzos del gobierno de Theresa May y de Robert Lighthizer, el representante comercial de EU en el gobierno de Trump, para reducir las expectativas de cualquier acuerdo inminente entre Estados Unidos y Reino Unido, incluso cuando en Gran Bretaña comienza a surgir la oposición a uno. Reino Unido no puede sostener negociaciones comerciales formales con ningún otro país hasta que salga de la Unión Europea.
En un comunicado conjunto que se publicó después de la primera reunión de un grupo de trabajo de comercio de EU y Reino Unido el lunes, los dos ministros de comercio dijeron que el objetivo inicial es asegurar la “continuidad” para las empresas británicas y estadunidenses después del brexit y prepararse para las negociaciones sobre un “posible “acuerdo.
Como parte de ese trabajo, Fox publicó un informe el martes sobre el comercio de Reino Unido con los 435 distritos del Congreso de EU con el que busca reforzar la importancia de la relación comercial entre Estados Unidos y Reino Unido, que ahora tiene un valor de más de 150 mil millones de libras (unos 200 mil millones de dólares) al año.
Mientras que cualquier negociación sustantiva no puede comenzar hasta después de que Reino Unido abandone la Unión Europea, en marzo de 2019, Fox dijo que cualquier acuerdo puede ocurrir rápidamente y en paralelo con las propias negociaciones comerciales de Reino Unido con la Unión Europea. “Haremos todo el trabajo preliminar y la debida diligencia ahora para que cuando salgamos de la Unión Europea tengamos una ventaja inicial sobre un acuerdo negociado”, dijo a Bloomberg Tv.
En una señal sobre lo difícil que puede ser esa negociación, Fox pasó la mayor parte de su visita en Washington esquivando preguntas acerca de si algún pacto tendría como resultado la importación de pollo lavado con cloro de EU a Reino Unido.
Los activistas contra el comercio y los grupos en defensa del consumidor de Europa durante muchos años utilizaron las prácticas de entre ambos países representa 200 mil mdd al año, según informe Berlín de explotar la debilidad del euro para obtener una ventaja producción avícola de Estados Unidos como una medida de los temores que existen de que cualquier acuerdo con EU puede socavar la seguridad alimentaria de la Unión Europea y otras normas. Junto con los pollos lavados con cloro, también argumentaron que cualquier acuerdo con Estados Unidos obligaría a los agricultores europeos a adoptar los granos genéticamente modificados y la carne de res con tratamiento de hormonas.
El poderoso grupo de cabildeo agrícola de Estados Unidos lo rebate y dice que al igual que los organismos genéticamente modificados y la carne de res de EU, la práctica de utilizar agua clorada para lavar los pollos es un método seguro y que las reglas de la Unión Europea no son otra cosa más que una barrera comercial diseñada para proteger a los agricultores europeos.
En enero de 2009 el gobierno de George W. Bush llevó ante la Organización Mundial del Comercio las reglas de higiene de la Unión Europea sobre las aves de corral. Pero el caso nunca se resolvió y, en su lugar, el gobierno de Obama buscó abordar el tema en las negociaciones de la Asociación Transatlántica de Comercio e Inversión, un tratado más amplio.
El exabrupto de “muy proteccionista” de Trump el martes es la señal más reciente de lo lejos que están de reanudar las negociaciones con la Unión Europea, aunque tanto Wilbur Ross, su secretario de Comercio, como Lighthizer, plantearon la posibilidad en los últimos meses.
El presidente y sus asesores también se manifestaron contra el superávit comercial que tiene Alemania con Estados Unidos y acusaron a Berlín de explotar la debilidad del euro para obtener una ventaja comercial sobre EU. También se produce cuando los funcionarios de la Unión Europea se preparan para una decisión de Trump sobre si va a restringir las importaciones de acero a Estados Unidos por motivos de seguridad nacional, una medida que probablemente afectaría a Alemania y a otros productores europeos.