Seguirá el programa de misiles, afirma Teherán
Irán condenó ayer las nuevas sanciones adoptadas por el Congreso estadunidense en su contra, y afirmó que proseguirá “con todas sus fuerzas” con su programa balístico, mientras que un nuevo incidente en menos de un mes, en aguas del Golfo Pérsico, opuso a navíos de ambas naciones. “Nuestra política en el ámbito militar y balístico es muy clara y es un tema de asuntos internos. Los otros países no tienen el derecho de intervenir”, declaró a la televisión estatal el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores iraní, Bahram Ghasemi.
El proyecto de ley para imponer sanciones contra Rusia, Irán y Corea del Norte fue votado por el Congreso de EU y queda pendiente la firma del presidente Donald Trump.
En el caso de Irán, estas sanciones afectan su programa balístico, los derechos humanos y el apoyo de Teherán a grupos como el Hezbolá libanés, clasificados por EU como “terroristas”.
En tanto, Teherán y Washington se acusaron mutuamente de proceder a maniobras provocadoras en el Golfo Pérsico, que terminaron el viernes con el lanzamiento de bengalas de advertencia por parte de un helicóptero estadunidense.
El incidente, que ocurrió en la región petrolera y de gas de Resalat, en la zona central del Golfo, se registró cuando el portaaviones Nimitz y otro buque que lo acompañaba, enviaron el helicóptero cerca de los barcos de los Guardianes de la Revolución, indicó un comunicado de este cuerpo de élite iraní, que calificó de “conducta no profesional y provocativa” de los tripulantes de los buques estadunidenses.
Según Washington, sus barcos realizaban un patrullaje rutinario cuando uno de sus helicópteros “observó varias embarcaciones de los Guardianes de la Revolución Islámica acercándose a las fuerzas navales estadunidenses a mucha velocidad”.
Teherán desmintió a Washingotn y acusó a sus navíos de lanzar las bengalas “hacia las fragatas iraníes”. m