Exponen objetos que inspiraron a Matisse
Reúnen 35 piezas extrañas que el artista coleccionaba y que retrató en sus obras
AMatisse no le seducían los materiales valiosos sino objetos que, por algún motivo y en un momento concreto, le emocionaban o sorprendían. Muchos de ellos acabaron retratados en sus obras. Esas fuentes de inspiración protagonizan una exposición en Londres.
La muestra Matisse en el estudio, que estará abierta al público en la Real Academia de las Artes de Londres desde el 5 de agosto hasta el 12 de noviembre, “revela cómo era como artista y nos ofrece lo extraordinario que había en su mente”, declaró Ann Dumas, una de las comisarias de la muestra. “Matisse no coleccionó materiales valiosos sino objetos que de manera espontánea vio en un momento en el que estaba emocionado, quizá en un mercado, y otros ni siquiera sabemos de dónde los sacó”, señaló Dumas, para precisar que el artista “siempre vivió rodeado de estos artículos” en su estudio.
La recopilación, que se considera la primera que exhibe los objetos personales del artista francés en Europa, recoge 35 piezas y 65 pinturas, esculturas y dibujos.
Entre los objetos destacados está una silla de estilo veneciano que, según la comisaria, “cautivó a Matisse” por su peculiar forma, compuesta por una concha de plata y una especie de delfines como reposabrazos.
Después de comprar la silla, Matisse dijo que fue “el objeto que más anheló durante años”, tal y como recordó la comisaria.
Entre las curiosidades de los cuadros que representan este asiento, Dumas destacó “lo diferente que es la pintura a lo que es la silla en realidad”, ya que en la obra dibujó unas flores y escribió sus iniciales.
También resalta un vaso verde de cristal que compró en España en 1911 y el cual pintó en dos de sus cuadros, y una olla para hacer chocolate que le dieron al artista francés como regalo de boda.
Una galería está dedicada a la colección de esculturas africanas que le ofrecieron al artista una nueva perspectiva en el arte occidental para retratar la figura humana, principalmente el desnudo femenino.
En la parte final de la exposición destacan las obras de Matisse sobre la simplificación del lenguaje y los signos, y en ella resalta un cuadro negro y dorado con caracteres chinos, que puede verse en algunas de las fotografías en las que él aparece retratado en su estudio. m