De Chalottesville, Kaepernick y demás…
A casi un año de que Colin Kaepernick decidiera utilizar el poder que le otorga tener un lugar privilegiado en el mundo del deporte y optara por arrodillarse durante el himno nacional de EU, fue justamente el pasado fin de semana cuando quedó demostrado porqué su manifestación contra la injusticia racial fue, es y seguirá siendo importante. Tres muertos y más de 30 heridos fue el saldo que dejaron las protestas entre supremacistas blancos y anti racistas en Charlottesville el sábado. Ese mismo día, en el Raiders vs Cardenales, vimos a Marshawn Lynch sentarse y disfrutar de una banana durante la entonación del himno, mientras que el domingo, su ex compañero Michael Bennett de los Halcones Marinos, siguió el ejemplo en el encuentro ante los Cargadores. El corredor no dio declaraciones, contrario al ala defensiva, quien aseguró que es su plan hacerlo el resto de la temporada: “Con todo lo que ha estado pasando los últimos meses, especialmente los últimos días en Virginia, solo quería seguir utilizando mi plataforma para hablar de la injusticia”. Se ha reportado que a estos dos personajes se les sumarán varios más a raíz de lo sucedido en Charlottesville. De entrada, Chris Long, quien se coronó en el Super Bowl pasado y no acudió a la Casa Blanca a la visita con el presidente, utilizó sus redes para condenar los actos que se dieron en la ciudad donde creció, mientras que LeBron James tuiteó en contra de Donald Trump, por tardar más de 48 horas en dar un claro mensaje en contra de los nacionalistas blancos y racistas. En la NFL, 70% de los jugadores son afroamericanos, pero no se espera que pronto un jugador blanco se una a la protesta durante el himno. Esto nos regresa al caso Kaepernick y la manera en que ha sido llevado, pues no es más que otra prueba de la división racial que existe en Estados Unidos y en la propia Liga. No soy experta en futbol americano para decir si el quarterback tiene el nivel para estar en un equipo la próxima temporada, pero he leído a suficientes expertos. Basado en estadísticas e investigación, me parece que Stephen White de SB Nation tiene el mejor argumento para concluir que Colin no tiene porqué estar desempleado este año, a menos claro, que el desaire de las directivas se deba a su activismo.