“Anaya no decide quién es panista”
“Vivimos la mayor crisis interna; Ricardo es el responsable del conflicto en el Congreso”
Los cinco senadores panistas que se rebelaron a la instrucciones de la dirigencia de su partido, encabezados por Ernesto Cordero, advirtieron que desconocerán una expulsión que provenga de los órganos partidistas que operan “a modo del autócrata” dirigente Ricardo Anaya, de quien pidieron su salida, y adelantaron que acudirán al Tribunal Electoral a exigir que se respeten sus derechos.
En una carta pública, los cinco rebeldes exigieron un proceso justo, público e imparcial, al acusar que Anaya es el responsable de la crisis en el Congreso y de que no haya presidencia en la Cámara de Diputados.
Los senadores Ernesto Cordero, Roberto Gil Zuarth, Jorge Luis Lavalle, Javier Lozano y Salvador Vega Casillas rechazaron haber aceptado la presidencia del Senado en la figura del ex secretario de Hacienda como una transacción o acuerdo para aprobar el pase directo del procurador Raúl Cervantes a la Fiscalía General de la República, al sostener que lo hicieron para darle estabilidad a esa cámara y que funcione con normalidad.
Acusaron que lo ocurrido en la sesión de instalación es el reflejo crudo de la división que vive Acción Nacional, donde el problema central de su convivencia es la dualidad de dirigente y candidato de Ricardo Anaya.
Sostuvieron que en su intento por capturar y apropiarse de todo —desde los promocionales de radio y televisión hasta las candidaturas, de los presupuestos y las presidencias de las cámaras legislativas— ha llevado al partido a una tensión insostenible.
“Vivimos la mayor crisis interna en la historia reciente del partido y solo hay un responsable: Ricardo Anaya. Por eso exigimos
“Ordenó a senadores boicotear la sesión de instalación, como en la Cámara de Diputados”
que se separe inmediatamente del partido, antes de que sea demasiado tarde. Enfrentaremos el proceso de expulsión con dignidad y hasta las últimas consecuencias. Exigimos un juicio justo, público, imparcial, en el que se respeten nuestras garantías y derechos”.
En ese sentido, desconocerán los resolutivos que tomen las autoridades del partido y adelantaron que llegarán hasta el Tribunal Electoral, porque Anaya no va a decidir quien sí es panista y quien no.
De acuerdo con los ex funcionarios del gobierno calderonista, lejos de orquestar una maniobra a espaldas del partido, decidieron no ceder al chantaje en la elección de la Mesa Directiva del Senado.
Ventilaron que Anaya ordenó a los senadores boicotear la sesión de instalación, “tal y como sigue aconteciendo en la Cámara de Diputados”, pues el dirigente de Acción Nacional apostó por una crisis constitucional para operar así una cortina de humo que pudiera tapar el escándalo en torno a sus propiedades y bienes.
Sobre el tema del fiscal, Cordero, Lozano, Gil Zuarth, Lavalle y Vega Casillas señalaron que su posición es absolutamente clara en el tema: “Votaremos contra la minuta de la Cámara de Diputados que pone en antesala la conversión de la actual procuraduría”.
Dijeron que la llamada “minuta Anaya” es deficiente y disfuncional y significa un retroceso para el fortalecimiento de la procuración de justicia en el país. m