GRITOS Y JALONEOS EN SAN LÁZARO POR LOS APOYOS
La bancada del PRI exige a PAN, PRD y Morena renunciar al financiamiento del último trimestre del año y conformar en conjunto una bolsa de $650 millones
Con pancartas en tribuna y a gritos desde sus curules, la fracción del PRI en la Cámara de Diputados exigió a PAN, PRD y Morena renunciar al financiamiento público del último trimestre del año y conformar en conjunto una bolsa de 650 millones de pesos para los damnificados por los sismos.
Reproches y descalificaciones derivaron en una ríspida confrontación verbal y jaloneos entre priistas y lopezobradoristas.
El legislador Omar Noé Bernardino, del PVEM, cruzó incluso mentadas de madre con los diputados Ariel Juárez y Jesús Valencia, de Morena, para terminar con un fallido desafío a golpes.
Los diputados del Revolucionario Institucional desplegaron tres mantas en gran formato con las frases “No seas Canaya” (SIC), “Alejandra puro rollo” y “AMLO no seas lagarto”, respectivamente ilustradas con las fotografías de Ricardo Anaya, Alejandra Barrales y Andrés Manuel López Obrador.
En tribuna, la legisladora priista María Angélica Mondragón exigía a los opositores secundar a su partido y aportar sus prerrogativas a los damnificados por los terremotos del 7 y 19 de septiembre.
“Exigimos, por lo tanto, a todos estos partidos, lo exigimos y subrayadamente a sus dirigentes, a Ricardo Anaya, Alejandra Barrales y a ese tal AMLO, Andrés Manuel López Obrador, que actúen con congruencia”, arengó.
Los legisladores panistas abandonaron el salón de sesiones y los priistas aprovecharon para llevar sus pancartas hasta las curules de la oposición, pero los diputados de Morena las retiraron de sus asientos e intentaron sacarlas del recinto.
Sin embargo, diputadas y diputados del PRI corrieron tras sus adversarios para recuperar sus lonas y regresar con ellas al pleno.
Para entonces, al pie de la tribuna, Bernardino y Valencia se encaraban y reclamaban mutuamente la devolución del financiamiento público de sus partidos, hasta que Juárez llegó hasta ahí y desplazó con un empujón al legislador verde.
Con su bebé de diez meses bajo un solo brazo, la diputada Norma Xóchitl Hernández, también de Morena, se acercó incluso a cerrar filas con sus correligionarios, pero solo unos segundos después decidió volver a su lugar.
El presidente de la Cámara de Diputados, Jorge Carlos Ramírez Marín, llamó al orden y a la civilidad, sin conseguir la atención de los rijosos.
Declaró entonces un receso y personalmente bajó del presídium a negociar con la lideresa parlamentaria de Morena, Rocío Nahle, y sus correligionarios priistas.
“Esta cámara no tiene espacios exclusivos de manifestación, o se quitan todas (las pancartas) o se quedan todas: ¡decídanlo!”, remarcó, y finalmente se acordó despejar el salón para reanudar la sesión.
Previamente, Ramírez Marín reconoció que es inconstitucional que los partidos políticos donen el presupuesto asignado por el Instituto Nacional Electoral (INE), como advirtió el jurista y académico Diego Valadés.
El diputado presidente reafirmó, sin embargo, que la vía más rápida y legal es renunciar a los recursos como lo hizo el PRI.
En entrevista, señaló que la propuesta priista de que los partidos políticos renuncien a los recursos asignados por el órgano electoral lo que resta de este 2017, es una de las alternativas más prácticas y viables para tener un fondo inmediato destinado a la reconstrucción y a los damnificados de los recientes terremotos que afectaron al centro del país, sin caer en el desvío de recursos.
Esto, en respuesta a lo dicho por Valadés, quien aseguró que las propuestas que han hecho los partidos políticos para renunciar a los recursos públicos que se les asignan con fines electorales y destinarlos a la reconstrucción luego de los sismos son inconstitucionales.
El constitucionalista explicó que en caso de que los recursos públicos que hoy manejan terminen aplicándose a objetivos no electorales, los partidos políticos serán merecedores de una sanción por parte del órgano electoral.
Por ello, Ramírez Marín señaló: “tiene razón Diego Valadés, ya lo habíamos dicho, los partidos pueden renunciar a sus prerrogativas, pero una vez que las reciben, una vez que son erogadas conforme al Presupuesto de Egresos de la Federación, ya no pueden hacer nada con ellas que no sea exactamente la finalidad que señala la Constitución para el financiamiento público de partidos”, subrayó. M