Reguladores europeos, contra crédito incobrable
Presión a la banca italiana para aplicar reglas más estrictas y hacer frente a la cartera morosa acumulada
Los supervisores bancarios de la zona euro intensificarán un enfrentamiento con Italia al presionar para que se apliquen reglas más estrictas para hacer frente a la acumulación de casi un billón de euros de préstamos morosos que quedaron de la crisis financiera en la región.
Después de que la semana pasada el Banco Central Europeo (BCE) dio a conocer los planes para exigir a los bancos que mantengan más garantías frente a nuevos préstamos que se vuelven improductivos, los supervisores de la zona euro ahora quieren una regla similar para la cartera de préstamos incobrables de los bancos, de acuerdo con dos fuentes que tienen conocimiento de las discusiones.
“Hay una coalición muy general entre los reguladores de la eurozona en favor de tratar el inventario actual de los préstamos morosos como a los futuros”, dijo una persona que conoce sobre las deliberaciones. El BCE no quiso hacer comentarios.
Previamente dio señales de que podría endurecer su enfoque sobre lo que ha sido uno de los mayores problemas del sistema bancario europeo y va a emitir nuevas guías para tratar con préstamos heredados en el primer trimestre de 2018.
Los bancos que supervisa directamente el BCE están expuestos a préstamos incobrables con valor de 915 mil millones de euros, o alrededor de 4 por ciento de la exposición total. En Italia, donde la acumulación de préstamos incobrables es un problema particularmente grave, el ex primer ministro Matteo Renzi y los banqueros centrales italianos ya criticaron el cambio propuesto por el Banco Central Europeo al decir que van a hacer que los bancos sean más renuentes a prestar y se corre el riesgo de una nueva crisis crediticia.
Los bancos italianos, incluidos los que están supervisados internamente, al igual que los que tienen la supervisión del BCE, tienen una exposición de 326 mil millones de euros de créditos morosos. Un grupo de trabajo del BCE con autoridades nacionales publicó la semana pasada sus propuestas para hacer frente con los préstamos morosos. Esos cambios exigen que los bancos cubran totalmente las exposiciones incobrables en un plazo de dos años para la parte no garantizada del préstamo, y siete años de cualquier parte asegurada por una garantía.
Las nuevas reglas todavía tienen que aprobarse, y el próximo mes el BCE realizará una audiencia pública sobre los cambios.
Sharon Donnery, subgobernador del banco central de Irlanda, quien dirige el grupo de trabajo, dijo que cuando se publicaron las propuestas todavía se tenía que tomar una decisión sobre cómo lidiar con los préstamos heredados.
Sin embargo, desde entonces las conversaciones avanzaron. “Tenemos una relativa confianza de que podemos llegar a un acuerdo para una solución limpia, transparente y consistente similar a la propuesta para los préstamos incobrables futuros, dijo una persona con conocimiento de las discusiones.
Los miembros italianos del grupo se opusieron a los cambios. El cambio puede aumentar sustancialmente el costo de retener préstamos morosos en los balances. Los precios de las acciones de algunos bancos de tamaño medio cayeron esta semana a raíz de las propuestas, y los legisladores y banqueros europeos expresaron abiertamente su oposición.