Milenio

A mejorar su accionar

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Alas 6:30 de la mañana de hoy, la selección mexicana Sub 17 se midió a su similar de Irán en los octavos de final del Mundial de la especialid­ad que se celebra en India.

Los chavos tricolores se metieron de panzazo a esta instancia, pues en la primera fase empataron ante Irak y Chile y cayeron ante Inglaterra, de ahí que esperemos que mejoren su accionar y continúen adelante en el certamen.

El equipo mexicano entrenó ayer por espacio de hora y media, puliendo detalles y dando las últimas indicacion­es previas al cotejo. Al término del entrenamie­nto, la delegación mexicana hizo el reconocimi­ento de cancha en el estadio Pandit Jawaharlal Nehru.

Por la tarde, se llevó a cabo la conferenci­a de prensa, en la que el director técnico Mario Arteaga, así como el jugador Marco Ruíz, hablaron con los medios.

“El partido que está planeando México es de ganar para seguir avanzando a la siguiente fase. Irán es un rival complicado, lleva ganados tres encuentros y nos llama la atención el 4-0 que le metió a Alemania. Pero son partidos nuevos, lo que pasó en la fase de grupos quedó atrás y ahora es ganar o irse a casa y México lo sabe. Vamos a plantear un partido para ganarlo en los 90 minutos”, declaró Arteaga, quien al ser cuestionad­o sobre cómo ve el hecho de que hayan avanzado cono tan sólo dos puntos, dijo:

“Hay dos formas de tomarlo. La primera es que tuvimos una fase de grupos complicada, en donde los rivales también querían pasar a la siguiente ronda y por supuesto que le complicaro­n el funcionami­ento al equipo mexicano. Irak nos hace una formación muy defensiva y tuvo la fortuna de hacer gol primero, nos sobrepusim­os a ese resultado. Ante Inglaterra, la idea era en el primer tiempo no recibir gol para en el segundo tiempo atacar más y, de alguna manera, nos sorprendie­ron con el tres por cero abajo. Contra Chile era un partido para ganar. Quisimos manejar las cosas inteligent­emente, sabíamos que con el empate pasábamos y podíamos enfrentar a Irán, entonces no hubo necesidad de arriesgar de más por sacar el triunfo”.

Por su parte, Marco Ruiz habló de lo que significa vivir esta experienci­a mundialist­a:

“Es importante tener una experienci­a mundialist­a, es algo muy bonito para nosotros poder participar en este Mundial y sin duda significar­á mucho para nuestras carreras el enfrentarn­os con seleccione­s fuertes a nivel mundial”. Situación dual la de Paolo Guerrero en el gol que asegura repesca para Perú (de tiro directo se volvió indirecto por la intervenci­ón del portero). Perú celebra ese gol, tal como avisa el palíndromo.

El mejor equipo de los últimos cuatro años es Tigres. Lo dice la cantidad extraordin­aria de Finales que ha jugado. Una de Libertador­es, tres de Liga, dos de Concachamp­ions, una de Copa, dos Súper Ligas, una verdadera máquina de llegar a las Finales. Mientras que otros están eliminados y casi últimos en la tabla general, Tigres está quinto y peleando la punta. La fórmula del Tuca Ferretti es la correcta, el sábado pasado ante León hicieron 505 pases.

Fue un deleite ver la cantidad de pases bien hechos, 89 por ciento de precisión, notable lo de Tigres; 15 disparos ante el León y 28 centros al área de Yarbrough. Faltó el gol, es cierto, no lo puedo negar, Tigres no tuvo la contundenc­ia de siempre, es cierto, fue un mal partido en cuanto a la definición.

Bien lo dijo Tuca ayer en conferenci­a de prensa: “Nadie me preguntó sobre la falta de contundenc­ia ante Chivas y Toluca, ahora vienen a preguntarm­e no sé con qué intención”.

Tiene razón, si Tigres pierde el único culpable es Tuca. Y están equivocado­s, Tuca no es el culpable. Si Tigres hizo 15 disparos buscando el arco rival y lanzó 28 centros al área del León, es porque se quiere ganar.

Tigres siempre sale a atacar, a ofender, a buscar la portería contraria. Porque Tigres no es de esos equipos cobardes que salen a defender, a no tener la pelota. A regalarle la cancha al oponente. Tigres tiene personalid­ad y eso genera envidias, mala vibra.

Por favor que nadie se olvide de Tigres, ya que entrando a la Liguilla pone a temblar a todo el futbol mexicano.

El partido contra León no fue el mejor en contundenc­ia, lo sabemos, pero usted y yo sabemos que Gignac en Liguilla es un fenómeno.

Tiempo al tiempo, por lo pronto hoy viene otra víctima más a la cancha del Volcán, el Veracruz, huele a goleada.

¡Ánimo!

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