Stan Kroenke, de barrer pisos a ser un magnate del deporte
El oriundo de Kansas City construyó todo un imperio comprando franquicias en las principales ligas del mundo, como la NFL, NBA, NHL y en la Premier League
Quienes lo conocen afirman que normalmente es un tipo retraído que solo habla lo necesario; sin embargo, al momento de hacer negocios es todo lo contrario, no por nada pasó de limpiar el piso de la pequeña empresa de su padre a ser un magnate de los deportes. Su nombre es Stan Kroenke.
The Silent Stan —El Silencioso Stan—, como le dicen sus amigos más cercanos, hizo su fortuna en la construcción de inmuebles, pero ha elevado todo un imperio deportivo con base en adquirir franquicias en las ligas más reconocidas del mundo: NFL (futbol americano), NBA (basquetbol), Premier League (futbol soccer) y NHL (hockey).
A lo largo de su vida el esfuerzo lo ha caracterizado, pero también ha corrido con suerte; la revista Sports Illustrated lo cataloga como “el hombre más poderoso del deporte”, está casado con una de las herederas del cofundador de Walmart y es uno de los más grandes multimillonarios del mundo. Kansas City es una ciudad que se encuentra en el estado de Misuri, Estados Unidos, y es mundialmente reconocida por ser la cuna de grandes intérpretes de blues y jazz como el saxofonista Charlie Parker. Ahí, en un pequeño poblado del sureste, nació en 1947 Enos Stanley Kroenke.
Su infancia en el “Corazón de Estados Unidos” —como se le conoce a ese estado— estuvo alejada de toda la opulencia que ahora lo rodea; no solo tenía que caminar más de cuatro kilómetros para llegar a la escuela, a su regreso debía ayudar en las labores de la pequeña maderería de su padre.
Desde pequeño a Stan se le inculcó que la familia es algo fundamental en la vida de cualquier persona, pero también la educación. Elementos, según él, que fueron clave para alcanzar el éxito del que disfruta actualmente.
Su vida académica tuvo de todo un poco: obtuvo una licenciatura en Artes, una en Ciencias y una maestría en Administración de Empresas por la Universidad de Misuri.
El joven e inquieto Stan usó sus conocimientos adquiridos en el mundo académico para fundar una pequeña compañía inmobiliaria con la que desarrolló varias obras en su ciudad natal. La firma sería los cimientos de los que es ahora. En la universidad desarrolló un peculiar gusto por los deportes como el beisbol, basquetbol, atletismo y esquí. Fue precisamente en un viaje que hizo a Aspen, Colorado, para practicar éste último que conoció el amor en Ann Walton, la heredera del cofundador de Walmart, con quien se casaría en 1974.
Ann le abrió un nuevo mundo y Stan no lo desaprovechó. Fue gracias a los desarrollos inmobiliarios que concretó en zonas aledañas a las tiendas Walmart, de su suegro James Wal- ton, que logró hacer despegar y amasar una cuantiosa fortuna que a la fecha supera los 8 mil millones de dólares, según la revista Forbes.
Su esposa no solo ayudó a impulsar su fortuna, también tiene la suya, dado que a la muerte de su padre, Ann heredó la nada despreciable suma de 4 mil millones de dólares. Lo que significa que son una de las pocas parejas multimillonarias que existen en el mundo.
Ya con una cuantiosa cantidad de dinero en su bolsillo, Stan Kroenke se dio a la tarea de incursionar en un mercado que lo apasiona desde que era joven: los deportes.
Pronto fundó la empresa Kroenke Sports & Entertainment, con la cual se ha hecho dueño de equipos como los Louis Rams en la NFL, los Denver Nuggets, en la NBA, los Colorado Avalanche, en la NHL, los Colorado Rapids, en la MLS y el Arsenal, en el futbol de Inglaterra.
A pesar de su clara afición por los deportes, El Silencioso Stan trata de mantenerse alejado de la operación de sus equipos, dejando a los que verdaderamente saben hacerse cargo, aún así son pocos los títulos deportivos que ha alcanzado en los últimos años. Sin importar lo que suceda, Kroenke seguirá el mismo camino, alejado de los reflectores, pero haciendo lo que más sabe, que
es ganar dinero. m