En el rock no solo se mueve la cadera, también la mente
El español habló de su nuevo álbum, en el cual predominan las canciones sociales
Al presentar su nuevo material discográfico, Expectativas, en un evento al que algunos de sus fans tuvieron la oportunidad de asistir, Enrique Bunbury destacó que las canciones incluyen una crítica a la sociedad actual y aprovechó para expresar que desde el rock se puede hacer reflexionar a la gente. “Por lo menos la mitad del álbum es un disco con textos sociales, que miran al mundo que nos ha tocado vivir, y creo que cualquier mexicano va a poder encontrar frases y versos en que sientan cómo se refleja la sociedad de este país, en canciones como “Bandeja de plata”, específicamente, o en alguna otra como “La ceremonia de la confusión” y “Parecemos tontos”, por ejemplo”, dijo. “Creo que el rocanrol, desde Bob Dylan, dejó claro que no solo es cuestión de mover las caderas, sino que también se pueden mover las neuronas”, añadió, al mencionar que siempre ha cuidado las palabras en sus producciones, desde sus primeros discos con Héroes del Silencio, y que lo verdaderamente importante es qué grado de sí mismo inculca en los temas y cómo se enfrenta a ellos.
Al preguntarle sobre las expectativas que tiene de la sociedad actual, sostuvo que “diariamente cada uno de nosotros puede realizar millones de pequeñas acciones que ayuden a que las cosas cambien, yo confió en esas ganas que muchos tenemos; pero mis expectativas de que los gobernantes cambien son escasas”.
Comentó que su nuevo material “es un disco de rock contemporáneo, que tiene una mirada puesta en el presente. Intento no repetir fórmulas del pasado, de otras décadas y otras maneras de hacer música. Intento que el rock que hago sea música de 2017. Hay de todo en este disco, creo que hay muchas visiones para ir descubriendo poco a poco”.
Enrique Bunbury platicó que después de terminar Palosanto (2013) comenzó a escribir nuevas canciones, juntando alrededor de 50, de las cuales presentó 25 a su banda, las ensayaron y, al final, garbaron 11 en Expectativas. “En el proceso de composición pasas dudas, alegrías, tristeza, entusiasmo, sobre todo los últimos meses fueron muy emocionantes, empecé a darme cuenta que había un material que me emocionada, que me gustaba, que creía que valía la pena ser grabado. Yo disfruto mucho del proceso previo”, compartió.
Agregó que “por la mitad del disco es oscuro, la segunda parte muestra una serie de cobijos, que son el amor y el arte, finalizó.