Con Combate Américas
El mexicano Érik Pérez deja el UFC, luego de nueve carteleras, y se incorpora a la promotora de Campbell McLaren, que le presentó una mejor oferta para pelear los siguientes 18 meses
Combate Américas fichó a la estrella más grande de su plantilla en Érik Goyito Pérez, el peleador de Guadalupe, Nuevo León, que dejó el UFC tras nueve peleas dentro del octágono.
El regiomontano pasó casi un año en la agencia libre, porque en noviembre del año pasado, cuando venció a Felipe Arantes en la Arena Ciudad de México, cumplió la última aparición de su segundo contrato con la promotora más grande del mundo, que decidió no igualar la oferta de Combate Américas, propiedad de Campbell McLaren, uno de los fundadores del UFC, que vendió la compañía hace 17 años.
“Desde que empecé a trabajar con ellos como analista me gustó que se están enfocando en el mercado latino y me tomaron a mí para darle un empuje y ayudarlos con eso”, compartió el mexicano vía telefónica desde San Diego, donde entrena en el gimnasio Alliance MMA.
A sus 27 años, tiene marca de 7-2 en UFC, pero ha peleado en otras ligas locales, como STFC, en el sur de Texas y BAMMA en el Reino Unido.
Ahora está ligado por 18 meses, donde espera cumplir con la expectativa: “Son cuatro peleas en un año y medio y la condición es que debo ganarlas todas, tengo que entrenar duro”.
Pérez Ruvalcaba vive el que considera como el “campamento más largo de su vida”, que comenzó unos días después de su pelea en México, donde se lesionó los ligamentos, aunque apenas se siente listo para pelear.
“Creo que será a comienzos del 2018, pero me siento fuerte, todavía vienen mis mejores años, hay que echarle para adelante, quiero ser el mejor del mundo, voy a progresar y donde quieran que pelee, voy a estar”.
Goyito dejará su rol de analista en las transmisiones de UFC para hacerlo de tiempo completo en Combate Américas, que en México es transmitido por Azteca Deportes, y en Estados Unidos por Telemundo/NBC, y fue un factor clave para su decisión, ya que las peleas de UFC solo pueden verse en Fighting Sports Network, canal a la carta en sistemas de paga.
“Lo que más me gusta es que la gente me va a poder ver sin pagar extra, o una cablera, voy a estar gratis en todas las casas y eso es lo que me hace más feliz”, agregó.
El próximo 11 de noviembre se llevará a cabo la Copa Combate en el peso gallo y el ganador se llevará, además de los 100 mil dólares, la oportunidad de pelear con él.
“El chavo que gane va a pelear en contra mía, yo encantado, ahora sí que vamos a ver quién es el más gallo, el que pelee conmigo va echarle todo el corazón para derrotarme, lo que me mete mucha presión, así que tengo que terminar las peleas antes del segundo (round), porque ellos pueden tomar nombre conmigo”, consideró Érik.
Participará en la transmisión de Copa Combate, pero ya comienza a tomar su distancia con los participantes, porque, “el que gane va a pelear contra mí, hay muchos buenos, con experiencia como Marcelo Rojo (Argentina), con el que ya he entrenado, también Ricky Palacios y Carlos Rivera, de México, todos son rápidos y tienen cualidades, cualquiera que gane será peligroso”.
En Combate Américas está comprometido a ser el campeón y desde su perspectiva, las puertas quedan abiertas si en un futuro regresa al UFC.
“Estoy agradecido con ellos, me ayudaron en mi carrera y siento que los ayudé a entrar con el público mexicano, quedamos bien, puedo regresar, pero ahorita tengo un compromiso con Combate Américas y tengo que hacer las cosas bien”, finalizó.