UNIVERSIDAD CERRÓ EL TORNEO EN CASA CON UN EMPATE A DOS ANTE SANTOS
Ni mejorando considerablemente en cuanto a rendimiento, Universidad venció a un Santos disminuido; los de Patiño vinieron de atrás e igualaron
Los días previos al enfrentamiento ante Santos eran tranquilos para Pumas… Al menos hasta el mediodía del jueves. La recriminación subida de tono de un grupo de aficionados en las afueras del estadio Olímpico de CU y que se hizo viral en redes sociales, saturó aún más de presión al grupo para conseguir un buen resultado. Universidad Nacional atraviesa por la mayor crisis de resultados en los torneos cortos, sumando 10 derrotas en el Apertura 2017, de eso no hay duda y parece que no encontrará la respuesta en la cancha. Todo terminó en empate a dos goles y la sensación de que se pudo sumar un triunfo.
Fue un primer tiempo insípido, de escasas emociones, en el que Pumas esbozó un par de posibilidades de real peligro, pero nada más; todo quedó en eso, en intentos. Santos aguantó, trató de no subestimar a un enemigo de que podría mejorar con espacios para profundizar y así generar opciones más claras. Si algo marcó la tendencia y llamó la atención, fue la actitud de los tres protagonistas regañados durante la semana; el compromiso con el que David Cabrera, Josecarlos Van Rankin y Jesús Gallardo disputaron el primer tiempo, contagió en gran medida a sus compañeros y se trasladó a la grada.
A veces, el futbol es un escenario injusto. Si bien Pumas no reflejó una superioridad marcada en la primera parte del cotejo, sí avisó que en el complemento podría ser así. Sin embargo, al 54’, Julio Furch abrió el marcador en favor de los Guerreros, luego de un recentro de tiro de esquina y gracias, de igual forma, a las concesiones de la defensa universitaria, que lo dejaron prácticamente solo en el área de Alfredo Saldívar. Lo que parecía una pelota perdida, terminó en tanto en contra. Era un golpe contundente a la confianza de David Patiño y sus dirigidos; irían contracorriente para recomponer.
Pasaron apenas 11 minutos, cuando Universidad Nacional tuvo un tiro libre que Santos minimizó; es más, parecía que a instantes de cobrar el tiro de castigo, Alan Mendoza, que pidió el balón, buscaría un servicio y no tanto un con golpeo directo. Silbatazo y no, sorpresa total. El lateral derecho aprovechó que Jonathan Orozco dejó parte del poste derecho desprotegido y con un excelente embate, conseguía el empate momentáneo en casa... Estallaba el estadio Olímpico de CU.
Para su ya escasa fortuna, los mismos espacios que le dieron a Furch la llave del marcador, le brindarían a Djaniny Tavares el tiempo de conseguir el segundo en pro de los de La Laguna. Al 68’, el de Cabo Verde sumó un segundo tanto que se reflejaba en los rostros de frustración de los jugadores, aficionados y entrenador de Pumas. Aun así, los de casa mantuvieron la calma, siguieron insistiendo y sumaron elementos al frente, con Pablo Barrera, que entró en los minutos finales, colocando balones que servían y de mucho. Fue hasta el 83’, que Jesús Gallardo logró el segundo de los felinos, para obtener una igualada en casa.
Además de un Goya con el retornado Javier Cortés, que ahora defiende los colores de Santos y sin mucha continuidad, la afición despidió a sus futbolistas entre aplausos y murmullos. Ha sido un 2017 para el olvido en el Pedregal, pues más allá del resultado de este domingo, Universidad acumuló a lo largo del año el 35% de efectividad en su casa, ganando seis de 17 encuentros disputados en su estadio y con tres entrenadores distintos en el banquillo. Tres empates y ocho descalabros completan una estadística que a los felinos les hiere; CU dejó de pesar y en gran medida, propició la debacle de un equipo sin identidad en el campo.
Y si no hay certezas de qué sucederá sobre el terreno de juego, menos en lo que respecta fuera de él. David Patiño se había comprometido a obtener el 50 por ciento de los puntos que disputara (nueve) y es un hecho que no lo conseguirá. El entrenador interino ha sumado cinco unidades en sus primeros cinco compromisos al mando de Pumas y en caso de vencer a Querétaro, el último rival en cuestión, se quedaría a un efectivo del objetivo marcado: “No nos ha alcanzado. Es muy poco tiempo para poder cambiar muchas inercias y aun así, logramos modificar ciertos detalles. La directiva evaluará, saben quién soy, amo a Pumas y acataré lo que se determine”, dijo el timonel luego del juego.
Para Pumas vendrá el receso de la Fecha FIFA, de manera inmediata, luego se medirá a los Gallos, en Querétaro y después, la posibilidad de replantear situaciones internas; el acomodo de la plantilla de cara a la siguiente temporada. El primer pendiente en la mesa es la situación con Luis Fuentes, que está prestado en Monterrey, pero del que Universidad espera retorne; la última palabra la tiene Rayados, que podría hacer válida la opción de compra y asegurar los servicios del lateral izquierdo formado en CU.
Me voy con la sensación de que todos mis jugadores han hecho lo que más han podido; Santos, un gran rival” No hemos dado los resultados que se esperaban; los aficionados tienen derecho a cuestionar” No nos ha alcanzado. Es muy poco tiempo para poder cambiar muchas inercias; la directiva evaluará” DAVID PATIÑO Entrenador de Pumas