Confían en que el yacimiento petrolero reactive la economía del municipio veracruzano, luego de que hace 10 años cerró su ingenio azucarero
Autoridades y pobladores
El hallazgo de un importante yacimiento petrolero en la Cuenca del Papaloapan, en Veracruz, hizo que la atención se volcara hacia Cosamaloapan, un municipio donde los más de 65 mil habitantes apenas se sostienen del comercio interno tras la quiebra, hace más de 10 años, de la industria azucarera.
Más de mil 500 millones de barriles de crudo y gas pueden encontrarse a 7 mil metros de profundidad entre los municipios de Cosamaloapan y Tierra Blanca, donde se perforó el pozo Ixachi-1, donde desde enero pasado comenzó la exploración.
Aunque la expectativa de la gente es grande, lo cierto es que el pozo será tapado en breve para buscar uno nuevo en la zona y así poder delimitar el diámetro del yacimiento. La extracción de crudo ocurrirá dentro de por lo menos un año con relativa facilidad y a un costo menor por tratarse de un depósito terrestre.
Además, aunque las autoridades y los habitantes están esperanzados en que el petróleo hallado sea un detonante del crecimiento en una zona marginada, la expectativa es que beneficie al estado de Veracruz y a la infraestructura que ya se tiene en el puerto, ubicado apenas a 70 kilómetros de la zona del hallazgo.
En el pozo Ixachi-1 trabaja no solo Pemex Exploración y Producción, también la estadunidense Halliburton, que opera como prestadora de servicios de perforación.
Personal que ahí labora informó a MILENIO que los trabajos comenzaron en enero y estiman que dentro de un año extraerán los primeros barriles de crudo y gas. Además, comentaron que la mayoría de ellos radica en Tabasco y cuando inicien los trabajos será más sencillo hacer uso de la infraestructura ya existente en el puerto veracruzano.
La presidenta municipal de Cosamaloapan, Adriana Maass, pidió a la Federación voltear hacia su municipio y confió en que si bien no se convertirán en el Dubái mexicano, sí puedan atraer inversiones que beneficien a esta región ubicada en la Cuenca del río Papaloapan.
Entrevistada por MILENIO, la alcaldesa refirió que la región de la cuenca han perdido potencial de desarrollo económico a consecuencia del cierre del ingenio San Gabriel, lo que dejó sin empleo a más de 2 mil personas;
Aunque no seremos el “Dubái mexicano”, sí se podrán atraer inversiones: alcaldesa “Aquí vamos al día para mantener a nuestra familia”, relata el herrero Apolinar Lara
además de que muchos más huyeron debido a una crisis de inseguridad que se vivió hasta hace un par de años, cuando se experimento una ola de secuestros que causó temor entre la gente de mayores recursos y la hizo huir.
Aunque el pozo Ixachi-1 se encuentra del lado de Tierra Blanca, su cercanía con Cosamaloapan y el hecho de que ese haya sido el municipio mencionado por el presidente Enrique Peña Nieto durante el anuncio del hallazgo, da esperanza de posibles inversiones para la creación de infraestructura y los empleos directos e indirectos que se requieran cuando comience la extracción de los más mil 500 millones de barriles de crudo hallados en la Cuenca.
Habitantes de Cosamaloapan comentaron que la situación económica en la región es difícil ante la quiebra del ingenio y la falta de inversiones en la zona. Solo por ejemplificar su complejidad, la alcaldesa se comprometió al inicio de su gobierno a edificar una plaza comercial y regresar salas de cine a Cosamaloapan, después de un cuarto de siglo; sin embargo, pasaron cuatro años para que lograra conseguir el terreno, los inversionistas y sobre todo los permisos del gobierno estatal. A menos de 60 días de terminar su gestión, logrará colocar la primera piedra de un proyecto que pretende reactivar la economía local.
“Sería bueno que se acordaran de nosotros, que vieran lo que años atrás ha pasado en esta zona. La han dejado muy atrasada, aquí ya no vivimos de la industria azucarera, esa está muerta, se vive de la agricultura y la ganadería, pero no es mucho tampoco; para sostener toda la zona, aquí vamos como se dice al día para mantener a nuestras familias”, relató el herrero Apolinar Lara, habitante de toda su vida de Cosamaloapan. m