Un software de Facebook busca evitar los suicidios
Facebook pondrá en marcha un software que consiste en una herramienta de inteligencia artificial para ayudar a los usuarios que puedan estar contemplando el suicidio mientras usan la plataforma, a fin de evitar que lo cometan, informó ayer la red social.
La compañía buscará reconocer patrones en las publicaciones y los videos en directo de los usuarios que sugieran que una persona está considerando la opción de acabar con su vida.
Según el vicepresidente de gestión productiva de Facebook, Guy Rosen, también mejorarán los mecanismos de identificación de quienes serían los primeros en responder ante un caso así y añadirán más investigadores en su equipo para informar de suicidios y autolesiones.
Las técnicas, que ya están siendo probadas en usuarios estadunidenses, incluyen un nuevo algoritmo para detectar situaciones que, hasta ahora, pasaban desapercibidas.
Facebook, que lleva más de 10 años trabajando en la prevención del suicidio, indicó que pretende que la herramienta esté disponible no solo en territorio estadunidense, sino también en la mayoría de los países, salvo los de la Unión Europea. “Podemos conectar a una persona angustiada con alguien que pueda apoyarla”, afirmó Rosen, y aseguró que en las labores de prevención se analiza la aparición de comentarios como “¿estás bien?” o “¿Puedo ayudarte?”, entre otras respuestas que publican los usuarios ante la emisión de un video.
Si el software detecta un posible suicido, alerta a un grupo de funcionarios de Facebook que se especializan en manejar ese tipo de reportes. El sistema sugiere recursos para el usuario o sus amigos, como un número telefónico de ayuda. Los funcionarios de Facebook también pueden llamar a autoridades locales para que intervengan.
La compañía contrató en marzo a 3 mil personas para revisar el contenido que pueda estar relacionado con el crimen o el suicidio, las cuales se añaden a los 4 mil 500 que ya trabajan para evitar prácticas que violen los estándares de la red social.
La empresa intenta atajar casos como el ocurrido en abril, cuando un tailandés transmitió cómo mataba a su hija de 11 meses y luego se suicidaba. m