Jai alai con aroma de mujer
No es un deporte exclusivo para hombres, aseguran las pelotaris mexicanas Doris Galindo y Casandra López, aunque son muy pocas las féminas que han jugado jai alai en el mundo
SANTIAGO CHAPARRO
Muchos quizá no sabrían qué responder a esta pregunta: ¿es el jai alai un deporte exclusivo para los hombres? En la historia son mínimas las crónicas de mujeres que jugaron este deporte. Se dice que la primera fue María Unzueta, nativa de Eibar en el País Vasco, en los albores del siglo XX, hermana de los pelotaris Cleto, Felipe y Cecilio, quienes jugaron en el Frontón México, sin embargo, su padre no la dejó ser profesional. María se vino a vivir en Acapulco, donde murió en 1948.
Doris Galindo Zamudio y Casandra López Santa Ana son orgullosamente dos pelotaris mexicanas. La primera es una abogada de 35 años y practica en el Club Mundet; la segunda tiene 21 años, es estudiante de Administración y Mercadotecnia en la Universidad Panamericana y entrena en el Frontón Inclán, ambas tienen una pasión: el jai alai.
-¿Cómo te enganchaste con este deporte?
Doris: “Tengo casi 20 años jugando. Es algo que empecé en Puebla a los 16 años. Cuando vi las cestas, el frontón, las pelotas, los cascos, fue un flechazo, así que me inscribí con el maestro Juan Manuel Cabrera El Pis y ensayaba todas las tardes en el Club Britania Zavaleta. La primera vez que me puse la cesta fue una sensación de adrenalina, emoción y felicidad. El sonido de la pelota es algo que hipnotiza. La cesta se convierte en una extensión de tu cuerpo, es el arma con la que te defiendes de la pelota, es parte de ti”. Casandra: “Llevo menos de un año practicando, antes jugaba frontenis, pero siempre me gustó el jai alai. Cuando iba a torneos en el Club Mundet o en el España, mientras esperaba mi partido, iba a ver jai alai. En julio, Luis Marín me llevó al Inclán y ahí comencé a aprender con Carlos de la Rosa. Recuerdo mi primer ensayo, fue el 17 de julio, mi maestro me prestó la cesta y estuve como una hora en el uno”.
-¿Te gustaría que hubiera más mujeres jugando jai alai?
Doris: “Parte de mi objetivo en esta vida es abrir brecha para que más mujeres puedan jugar. Tengo que prepararme porque quiero enseñarle a las niñas, que en el futuro haya una selección femenil. Quiero ver partidos donde las cuatro en Nacho la cancha sean mujeres y que haya una Liga femenil. El jai alai no es un deporte exclusivo de los hombres, entreno con ellos porque no hay mujeres. No podemos competir en fuerza, pero sí en posturas y elasticidad. Aunque mis lanzamientos no son tan fuertes, pongo la pelota donde hace daño”. Casandra: “Es un estigma pensar que la mujer no puede jugar jai alai. Son las mujeres las que dicen que es un deporte de hombres. En el Inclán juego con hombres, ninguno me ha negado la entrada. Durante el torneo en el Mundet tuve oportunidad de tirar pelota y se acercaron dos niñas a preguntar, es algo que me llena. Estoy dispuesta a crecer para ser ejemplo. Hoy tengo una ilusión, jugar un mundial femenil, me muero por representar a mi país haciendo lo que más me gusta”.
-¿Cómo evalúas que abran escuelas y se incluya a niñas?
Doris: “Es vital que los profesores traten igual a niñas y niños. Que sea un espacio donde no haya diferencia de género. Estamos en una época donde las mujeres ganamos lugares y eso tiene que pasar en el jai alai, en la medida que las mujeres entremos y tomemos esto con seriedad, se va a notar el papel de la mujer”. Casandra: “Pedro Andrinúa me hizo el mejor halago del mundo, me dijo que le gustaría que en unos años le enseñara a su nieta. Creo que es posible una escuela femenil, si no se animan a entrenar con un hombre, por qué no con una mujer. Me gustaría saber mucho para poder enseñarle a alguien más. Este deporte volverá a brillar. Yo no voy a parar hasta que haya en la ciudad un torneo femenil”.