Rinden homenaje a Rosario Green
Amigos, políticos y diplomáticos de México y el extranjero destacan sus logros y virtudes
De “emblemática y una embajadora que marcó época”, la calificó el secretario Videgaray
La Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) rindió ayer un homenaje luctuoso a la ex canciller mexicana, Rosario Green, quien falleció el pasado 25 de noviembre.
En el acto, el secretario Luis Videgaray entregó a los hijos de Rosario —Gabriel y Daniela— una bandera nacional y la réplica de su retrato que luce en la galería de cancilleres de la sede de la SRE.
Embajadores, ex cancilleres, ex líderes del PRI, integrantes del cuerpo diplomático mexicano y personal del extranjero acreditado en México participaron en la ceremonia, en la que se destacaron los logros y virtudes de Green.
Videgaray aseguró que “la mejor manera de homenajearla es poniendo en práctica sus ideas”.
Destacó que fue la primera canciller mexicana, durante el sexenio de Ernesto Zedillo, y también haber ocupado la Secretaría General del PRI, partido al que siempre perteneció, dos posiciones que compartió con Claudia Ruiz Massieu, también presente en la sala Benito Juárez de la sede de la cancillería.
Videgaray calificó a Green Macías de emblemática y una embajadora que marcó época, así como “una mujer que se atrevió a romper paradigmas y que siempre triunfó en las batallas que decidió luchar”.
Dijo que quienes hoy ocupan la SRE son “beneficiarios de su grandeza”, pues sus más cercanos colaboradores fueron alumnos y discípulos de Green, quien encabezó el Instituto Matías Romero, para formar al personal diplomático.
En el homenaje ofrecieron discursos Carlos de Icaza, subsecretario de Relaciones Exteriores, quien destacó la elegancia con la que se caracterizaba Green; Miguel Ruiz Cabañas, subsecretario para Asuntos Multilaterales y Derechos Humanos, quien recordó que Green fue su profesora en 1976; las embajadoras Mireya Terán y Olga Pellicer, amigas personales de la ex canciller.
Pellicer recordó que Green abrió el camino para las mujeres en el Servicio Exterior Mexicano, pues vivió en una época difícil, “como ahora”, para las mujeres que trabajan en el sector público. “A Rosario Green le tocó irrumpir con toda fuerza en la política, en la academia y en la diplomacia con dos armas que ella le resultaron fundamentales: su inteligencia y su persistencia”, destacó Beltrones.
El ex líder priista recordó los tiempos en que Green y él fueron compañeros legisladores. “Generosa como era nos llevó por la conciencia, estudio y percepción del derecho internacional y de los modos del mundo contemporáneo; su agudo conocimiento de los organismos multilaterales y olfato político nos reveló los misterios de formas de interactuar entre estados nacionales; escucharla en una cátedra siempre fue un deleite, su conversación, una delicia y su amistad y fraternidad un regalo que no tuvo precio”, expresó.
Al final del homenaje, se realizó una guardia de honor en torno al pedestal con la cenizas de Green. m