Plantón gay en Monterrey
esde el 6 de noviembre, Mario Rodríguez Platas y un grupo de activistas LGBTTTI hacen un plantón frente al Congreso de Nuevo León buscando sensibilizar a los diputados sobre la identidad de género, los hijos de parejas del mismo sexo y el matrimonio igualitario. Eso, cuando solo tres de 42 diputados han estado a favor de esos derechos que le son regalados a la comunidad heterosexual.
Fuimos a visitar el plantón el pasado 1 de diciembre. En tres horas los vimos comer ahí con lo que los amigos les llevan, solidaridad de más de mil 300 firmas a favor de sus exigencias. Mucha gente heterosexual que, decían, no entiende la cerrazón de los diputados cuando ya la Suprema Corte de Justicia concedió el matrimonio igualitario para todo el país.
“Nadie como uno para defender lo de uno”, decía la abuela de Rodríguez Platas. “Sé que no será fácil pero muchos de ellos saben que sé quienes son y sus vidas privadas. Diputados con ‘casa chica’, otros con doble vida —casados y gays—, y los que viven con Dios como principio pero no entendieron el mensaje de Magdalena…”.
Tengo admiración por Rodríguez Platas, que se confiesa priista pero parece de izquierda. “Pues es que el PRI tiene una izquierda. Yo exijo congruencia. En los estatutos del PRI existe la socialdemocracia. Ya no es época de dinosaurios. Este plantón de la comunidad gay no es la CNTE. Es un movimiento por la igualdad en Nuevo León”.
El día que lo visito llega Ángel Cervantes, del parlamento juvenil. Informa que 24 jóvenes de un total de 42 votaron por la unión cívica y el derecho de adopción de los gays. “Por mayoría los jóvenes estamos con ustedes”, dice. Ojalá los diputados del Congreso entiendan el mensaje porque “se están quedando viejos ante las nuevas generaciones”.
Rodríguez Platas es a Monterrey lo que José María Covarrubias al movimiento gay de la Ciudad de México: entregado en cuerpo y alma a la causa LGBTTTI. El centralismo no nos permite observar a quienes hacen historia de la diversidad sexual. Me dice: “pero aquí la derecha es en serio. No se anda por las ramas. El PAN es castrante. Son los peores”.
Ya llegó el frío a Monterrey “pero ni así nos vamos a mover del plantón. Aquí nos vamos a quedar hasta que tengamos una respuesta positiva. Y la habrá. Los diputados no quieren irse del Congreso. Pues bien, tendrán que cambiar de posición. Todos estamos siendo observados. Veremos quién se cansa…”.
Justo ese mismo día de visita aparece en MILENIO Monterrey el asesinato de un transexual en pleno centro de la ciudad, Alfonso Gutiérrez Martínez, conocido como Sandra. “¿Ves por qué no hay que tirar la toalla?”. Todos los derechos para todas las personas. M