Negocios
La leyenda cuenta que en una Navidad de 1992, Lee Kun-hee decidió regalar a los altos ejecutivos de Samsung un prototipo de celular que estaban desarrollando para lanzar al mercado; sin embargo, cuando llegó a manos extrañas, las críticas y burlas sobre el producto no se hicieron esperar.
Cansado de ser señalado como ser el dueño de una empresa de segunda categoría, dio la orden a sus trabajadores de detener la línea de producción y destruir todos los productos. Las pérdidas fueron enormes, pero poco le importaron a Lee, quien se alzo con un discurso motivador para anunciar que Samsung iba a cambiar por completo.
Dio la orden de cambiar absolutamente todo y la inversión en innovación sería la principal característica. Un par de décadas después llegarían los frutos, pues Samsung se convirtió en la primera compañía en fabricar un teléfono inteligente.
En ese transcurso, la empresa de las tres estrellas se convirtió en un referente de la tecnología mundial gracias a la fabricación de línea blanca, aparatos de sonido, pantallas de alta definición, computadoras de última generación, tabletas y por supuesto, celulares de gama alta. Para crear un imperio que compite con Apple por la corona en la fabricación de smartphones, Lee Kun-hee tuvo que enfrentar una serie de escándalos que empezaron desde su llegada a la presidencia de Samsung. Entró a trabajar en Samsung Group en 1968 y en 1987 fue nombrado presidente de la compañía, dos semanas después del fallecimiento de su padre. Su llegada a la máxima silla estuvo llena de problemas familiares, las cuales continúan hasta la fecha, dado que su hermano y hermana mayores nunca estuvieron conformes con la decisión. Su capacidad empresarial nunca ha estado en duda; sin embargo, los capítulos oscuros en su vida han sido una constante, sobre todo los relacionados con acusaciones de sobornos al gobierno, lo cual llevó a Lee a retirarse de la presidencia de Samsung en 2008, pero regresó en 2010. Actualmente su estado de salud es grave y su hijo Lee Jae-yong se prepara para tomar el mando. No obstante, las dudas se han apoderado de la compañía, toda vez que el heredero ha caído en prisión acusado de una serie de sobornos. m