TRASCENDIÓ
:Que
raro resultó ver banderas azules y amarillas juntas. En su tercer día de campaña Ricardo
Anaya, precandidato presidencial de la coalición Por México al Frente, tuvo su primer acercamiento público con panistas, perredistas y militantes de Movimiento Ciudadano y la verdad es que se superaron las expectativas, pues mientras que en sus actos anteriores había apenas un par de docenas, esta vez llegaron alrededor de 500 personas. Al evento arribaron perredistas y militantes de MC en vehículos que facilitaron regidores, mientras que los panistas llegaron en vehículos particulares y algunos de lujo, faltaba más.
:Que
en estas fiestas decembrinas, Andrés Manuel López Obrador solo parará un par de días durante este periodo de precampaña: 25 de diciembre y 1 de enero, y es que el tabasqueño asegura que tiene que continuar su recorrido por el país “para afianzar el triunfo”. Incluso en víspera de Nochebuena, el tabasqueño se reunirá con indígenas chontales en San Carlos, comunidad ubicada en su natal Macuspana.
:Que
el INE aún no ha tomado un acuerdo en el Consejo General respecto de lo que sucederá con las personas transgénero que acudan el próximo 1 de julio a votar, cuando la imagen de su credencial para votar no coincida con su apariencia. El asunto ha sido analizado, pero aún no encuentra el consenso necesario para que la autoridad electoral se pronuncie al respecto.
:Que
la precandidata de Morena a la Jefatura de Gobierno capitalina,
Claudia Sheinbaum, sorprendió a más de uno en la presentación de su equipo de trabajo rumbo a 2018, y no porque la coordinación esté a cargo del viejo conocido Alejandro Encinas, sino por la presencia del jefe delegacional en Tláhuac, Rigoberto Salgado. La ex delegada en Tlalpan salió en su defensa cuando en entrevista señaló que el funcionario local, hasta el momento, “no tiene ninguna denuncia” que lo vincule con el cártel de Tláhuac.
:Que
la Suprema Corte de Justicia de la Nación entró en receso desde el viernes pasado y reanudará labores hasta enero de 2018, con lo que será la Oficialía de Partes la que reciba una eventual acción de inconstitucionalidad contra la ley de seguridad interior, claro, una vez que la promulgue el jefe del Ejecutivo federal.