EL DOMINGO BAJA EL TELÓN celebra su millón de espectadores
El musical tuvo como madrina a una chica, seleccionada mediante redes sociales, en su función número 950 en el teatro Telcel de Plaza Carso
Aunos días de bajar el telón por última vez, El rey león celebró 950 representaciones y un millón de espectadores en México con la develación de una placa durante una velada especial, que dio a una afortunada del público la oportunidad de subir al escenario como madrina de honor. “Estoy muy orgullosa de estar frente a tanto talento, quiero agradecerles por todos los fans que siempre dan todo en escena, es la cuarta vez que vengo a verlos y les agradezco en nombre de todos”, dijo Beatriz Hernández, la joven que ganó una dinámica en redes sociales para develar la placa.
El productor Federico González Compeán y los productores asociados, Morris Gilbert y Julieta González, acompañaron a la mujer en el escenario; agradecieron al público su asistencia y aseguraron que es un sentimiento agridulce concluir está etapa.
Tras dos años y ocho meses de temporada en nuestro país, el reconocido musical dice adiós esta semana, no sin antes ofrecer una función especial para su público, que ovacionó a los actores en todo momento. “El ciclo vital” suena, los animales de la sabana desfilan por el escenario y las escaleras del Teatro Telcel, ante el llamado de la mandril Rafiki (Shirley Hlahatse), quien los reúne en la Roca del Rey para la presentación de Simba, el hijo de Mufasa (Jorge Lau) y Sarabi (Salua Jackson); las miradas de los espectadores muestran asombro ante el gran elefante, las cebras y jirafas, las manos de los más pequeños señalan hacia los actores que avanzan cantando.
Mientras Zazú (Mauricio Salas), las hienas, Timón (Alfonso Borbolla) y Pumba (Sergio Carranza) arrebatan carcajadas a chicos y grandes, con chistes a la mexicana, la maldad de Scar (Carlos Quesada) impone en escena, contrastando con la dulzura de Nala y la sabiduría de Rafiki; en conjunto, la música, la danza y los vestuarios transportan al público a un mágico mundo.
La cultura nacional resalta no solo los diálogos, tambien en una fiesta de alebrijes en “Yo quisiera ya ser el rey”, lo que a Zazú le recuerda “un carnaval de Veracruz”, y el baile de “La Bamba” de Timón y Pumba, que los asistentes reciben con las palmas arriba; mientras que la diversidad de la producción luce en “Él vive en ti” y el show final, que suena al ritmo de “El ciclo vital”.
Uno de los momentos más esperados es la alegre melodía de “Hakuna Matata”, que al- gunos espectadores no dudan en entonar; el más emotivo es la muerte de Mufasa. “El ciclo vital” suena una vez más, luego de que Simba (Agustín Argüello) es reconocido como legítimo rey y junto con Nala (Aitza Terán) presentan a su recién nacido; las luces se tornan tenues y los aplausos retumban en el Teatro Telcel, así termina una de las últimas representaciones.
En esta ocasión, Daphne Pantoja y Salua Jackson fueron los encargados de interpretar a los jóvenes Simba y Nala, y son quienes en el agradecimiento final se llevan una de las mayores ovaciones; aunque todo el elenco recibe un caluroso aplauso que da paso a la celebración de 950 representaciones. Ya sea por el amor al teatro, a los musicales o la clásica película de El rey león, por gusto propio, para acompañar a los amigos o pareja, o para acercar a los más pequeños de la familia a este espectáculo, el público llena el teatro con gusto y sonrisas en cara.
Aunque la cita es a las 20 horas, los espectadores llegan temprano y se dirigen a la entrada; algunos compran palomitas y refrescos, muchos se detienen a mirar los souvenirs, que incluyen tasas, ropa, joyería y peluches.