Nos contrató, aseguran dos líderes del grupo de reventadores de mítines
Un consejero de Morena
El 3 de enero al mediodía comenzaron a llegar con la indicación para reunirse a unas calles de Villa Quietud, en Coyoacán. En total eran 25 personas, para no dejar que se realizara el acto de Claudia Sheinbaum, precandidata de Morena a la Jefatura de Gobierno.
La indicación era llevar ropa cómoda, chamarra o chaleco, recordaron Lorenzo Montiel Ramos y Luis Alberto Montiel Andrade, dos de los líderes de los reventadores, quienes aseguran que fueron contratados por Gerardo Villanueva, consejero de Morena.
Tenían que llegar poco a poco y así lo hicieron, de seis en seis, para que no originaran sospecha y comenzar a reventar el acto hasta que llegara Sheinbaum.
Así llegaron al punto, se colocaron en las tres primeras filas. Eran 16 hombres y nueve mujeres, dijo Esthela Gómez, joven de 1.70 de estatura y 24 años. Todos de las delegaciones Coyoacán e Iztapalapa, principalmente.
Ella afirma que no preguntó quién los contrató, solo acudió por el pago, siguiendo instrucciones.
Los encargados de cobrar son los líderes, quienes al final ponen un punto de reunión para liquidar el adeudo.
Ella comentó que ese día se puso cheleco rosa y pantalón de mezclilla. Recuerda que desde la primera fila arrojó una silla al templete, después de sentir cómo le pegó algo en la cabeza, que supo era una moneda.
“Vine con mi hija de 9 años porque me dijeron que tenía que venir por pago con otra gente. Pero la verdad no pensé que se fuera a poner así, porque fue todo muy feo”, señaló Yoselin González.
“Primero, nada más estaban gritando las groserías y todo fue subiendo, hasta que de plano vi que la gente de adelante de mi empezó a aventar basura y sillas. Entonces por defender a mi hija agarré una de las sillas para cubrirme y salir, después regresé y en el coraje aventé huevos“, afirmó Concepción Gallardo.
Juan Velázquez, otro de los que acudió, señaló: “Estoy acostumbrado a vivir ese tipo de cosas.
“Ese día llevaba pants color vino y una chamarra gris; a mí nada más me iban a pagar por ir a gritar. Todo lo que pasó después fue por resguardarme, porque yo estaba en las orillas y cuando los de arriba empezaron a lanzar las sillas, a mí me tocaron y no me aguanté, me voltee y me calenté; tuve que responder. Luego me molestó más que estuvieran aventando sillas y se las regresé para que les llegaran hasta el templete. Nos estaban gritando que éramos porros y no, no es cierto” , explicó.
Después de la trifulca, los líderes de Morena en la ciudad, como Martí Batres y Sheinbaum, acusaron a Mauricio Toledo, diputado del PRD, y a la delegación Coyoacán de ser los culpables.
Toledo respondió que los involucrados no tienen que ver con él.
Aseguró que quienes iniciaron los desmanes y provocaciones fueron los integrantes de Morena, “lo que deja en claro que se trata de un autosabotaje”.
En tanto, la delegacion indicó que “coadyuvará proporcionando toda la información que le sea requerida por las autoridades competentes, para esclarecer los hechos”.
Montiel Ramos y Montiel Andrade acusaron a los dirigentes de Morena de no haber cubierto el pago de 96 mil pesos, ya que solo les dieron 10 mil de adelanto. M